El McLaren 765LT es uno de los superdeportivos más radicales de McLaren para su conducción en carretera, pero también una puesta a punto muy deportiva y una aerodinámica especialmente trabajada para circuito.
Superando los 400.000 euros y acercándose a los 500.000 euros equipando extras opcionales, el único superdeportivo que hubiera podido rivalizar con el McLaren 765LT era el Lamborghini Aventador SVJ, que ya no está a la venta. En rendimiento, el Ferrari 296 GTB podría ser uno de los deportivos más próximos al McLaren 765 LT.
El McLaren 765LT está disponible con carrocerías Coupé y Spider y, basado en la plataforma del McLaren 720S, es el McLaren más potente y deportivo del catálogo Super Series de McLaren.
McLaren 765LT: aerodinámica y ligereza
Estéticamente, el McLaren 765LT es un deportivo muy radical y llamativo en el que la forma ha quedado supeditada a la función. La presencia de alerones, spoilers y aditamentos de carrocería grandes y prominentes, no se debe a la búsqueda de una estética más agresiva, sino sobre todo a garantizar un rendimiento aerodinámico excepcional. La carga aerodinámica máxima del McLaren 765LT es un 25% superior a la del McLaren 720S.
El McLaren 765LT goza de una zaga muy característica, alargada, y perfectamente esculpida, culminando en un alerón retráctil, que no solo ajusta su altura e inclinación para regular la carga aerodinámica en función de las circunstancias, sino que también ejerce la función de aerofreno.
Otro de los aspectos más trabajados del McLaren 765LT ha sido el del aligeramiento. Con 1.339 kilogramos, el McLaren 765LT es 80 kilogramos más ligero que el McLaren 720S. Su sistema de escape cuádruple, fabricado en titanio, pesa tan solo 10,9 kilogramos. McLaren ha empleado también lunas más finas y ligeras, construidas con un policarbonato como el utilizado en algunos deportivos de carreras.
El Long Tail de McLaren
La coletilla Long Tail (LT) presente en su nombre hace referencia a una de sus particularidades aerodinámicas, al hecho de contar con una cola alargada, que mejora su rendimiento aerodinámico y que lo convierte en uno de los superdeportivos, para la carretera, y para el circuito, más capaces de la gama McLaren.
La denominación Long Tail se remonta a los años noventa y al legendario McLaren F1, que en su versión GTR de competición dispuso de una actualización para el campeonato FIA GT de 1997 que recibió la mejora aerodinámica de su «cola larga», para aumentar la carga aerodinámica, y mejorar su rendimiento en los circuitos, siendo conocido popularmente como longtail. Obligada por los requisitos de homologación y los importantes cambios acometidos en el deportivo de carreras, McLaren produjo 3 unidades del McLaren F1 GT – incluido el prototipo – como versiones de calle del F1 GTR Long Tail.
Desde entonces, y con el nacimiento de la marca McLaren Automotive, Long Tail se ha convertido en una denominación específica para una serie de superdeportivos más radicales y muy enfocados en su rendimiento en circuito. Los McLaren que reciben la denominación Long Tail, como este 765LT, no solo gozan de una aerodinámica más trabajada, sino también de más potencia, menos peso y una puesta a punto aún más deportiva.
El McLaren más potente del catálogo Super Series
El McLaren 765LT es con 765 CV de potencia el modelo más potente de la gama Super Series de McLaren. Para encontrar un McLaren más potente, tendríamos que recurrir a la gama Ultimate, en la que McLaren dispone de su gama de superdeportivos más exclusiva, producidos en series limitadas.
En posición central, y tras el habitáculo, el McLaren 765LT cuenta con un motor V8 de 4.0 litros de desplazamiento, de cigüeñal plano, inyección directa, sobrealimentado por Twin Turbo, entregando 765 CV a 7.500 rpm y un par máximo de 800 Nm a partir de 5.500 rpm, con el corte en las 7.800 rpm. Por supuesto, el McLaren 765LT es un deportivo de tracción trasera, intermediando un cambio de doble embrague de 7 relaciones.
El motor V8 del McLaren 765LT ha sido heredado del resto de la gama McLaren, entregando 45 CV más que en el 720S, recibiendo un escape de titanio, cojinetes más rígidos, refuerzos en caja de cambios, una bomba de gasolina y aceite modificadas y una gestión electrónica específica para la centralita. Opcionalmente, puede equipar los frenos carbocerámicos del McLaren Senna.
Un superdeportivo sin rival en el mercado
El McLaren 765LT es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos, de 0 a 200 km/h en 7 segundos, y de alcanzar una velocidad máxima de 330 km/h. Según la experiencia de conducción de nuestro probador Juanma García Cámara, el McLaren 765LT es un deportivo practicable en carreteras públicas pero, sobre todo, pensado para el circuito.
A diferencia de otros superdeportivos sobrealimentados por turbo, como el Ferrari F8, en los que se ha buscado un carácter de motor atmosférico, siendo muy puntiagudos en la parte alta del cuentarrevoluciones, el McLaren 765LT ofrece un rendimiento más contundente, de motor turboalimentado, con un mayor empuje en la parte baja y media del cuentarrevoluciones. Contribuye a esa sensación el hecho de que disponga de unas relaciones de cambio cortas.
El del McLaren 765LT es también el sonido de motor V8 turbo más contundente que hayamos probado, superando al de otros V8 turbo probados por el equipo de Diariomotor, como los de Ferrari, Lamborghini, o Porsche.
A bordo, el McLaren 765LT es casi un deportivo de carreras
A bordo, el McLaren 765LT goza de un habitáculo totalmente enfocado en el conductor, que combina un diseño propio de un deportivo de carreras, con las comodidades imprescindibles en un coche moderno.
Nos encontramos con un puesto de conducción con un volante al estilo McLaren, casi redondo, pequeño, de aro fino y sin botones. Tras él, una instrumentación completamente digital y orientada a la conducción deportiva, que en su modo más deportivo (Track) pivota y se transforma en una pantalla más baja y completamente horizontal, para minimizar las distracciones y mostrar la información imprescindible para su conducción en circuito. Dispone de asientos de fibra de carbono, muy ligeros, y con un buen mullido, que opcionalmente pueden sustituirse por los asientos tipo baquet del McLaren Senna.
Como concesiones al confort, un techo acristalado electrocrómico, que pulsando un botón se oscurece para evitar las molestias de los rayos del sol.