Aunque lo prioritario ahora sea, sin duda, hacer frente a la crisis sanitaria que ha provocado el coronavirus, y atender a las normas y las recomendaciones de las autoridades, que nos han obligado a confinarnos en nuestros domicilios para evitar la propagación del virus, desde el principio ya os venimos advirtiendo de los posibles problemas que pueden surgir por tener nuestros coches parados durante semanas. Precisamente estos días el RACE alertaba de un incremento de llamadas a su servicio de asistencia de conductores de vehículos diésel, un repunte que contrasta con la caída que ha sufrido el uso del automóvil en las últimas semanas por las restricciones al movimiento. ¿Por qué están aumentado las llamadas a la asistencia en carretera de estos diésel, cuando menos se están utilizando? ¿Qué posibles averías pueden surgir por tener un diésel parado mucho tiempo? ¿Cómo podemos evitar esas averías en nuestro diésel?
Averías y problemas por tener parado un diésel
Como ya os decíamos, estos días ya habíamos advertido de los posibles problemas que pueden surgir por tener un automóvil parado durante varias semanas. Nos consta que durante el estado de alarma se han incrementado los servicios atendidos por asistencias en carretera y grúas, que han seguido trabajando estos días para garantizar el funcionamiento de las actividades esenciales. La causa más común de las asistencias ha sido problemas con el sistema de arranque y la batería, de ahí que ya os hayamos dado consejos para tener parado el coche, para proteger la batería durante el estado de alarma, e incluso cómo arrancar un coche con un arrancador portátil.
Pero, según el RACE, los servicios que han atendido estos días van más allá de asistencia a clientes cuyos coches han visto cómo su batería se descargaba. El RACE alertaba de que muchas de las llamadas a su servicio de asistencia han sido de conductores de diésel, que han visto cómo se encendía un testigo en la instrumentación de su coche y cuyo diagnóstico tenía que ver con problemas en el filtro de partículas de su diésel.
Problemas en el filtro de partículas de los diésel
El problema del que alerta el RACE tiene mucho que ver con el uso, o no uso, que estamos haciendo de nuestros coches estos días. Por el propio funcionamiento de los filtros de partículas de los diésel que, como su propio nombre indica, retienen hollín y residuos sólidos de la combustión de los motores de gasóleo, la falta de uso, y la utilización de nuestro vehículo únicamente en trayectos cortos, limitándose a actividades esenciales y permitidas, como hacer la compra en el supermercado más cercano, facilita la saturación y obstrucción del filtro de partículas de nuestro diésel.
Esa saturación y obstrucción del filtro de partículas suele evidenciarse por la activación de un testigo luminoso en la instrumentación. A la larga, la obstrucción del filtro de partículas puede hacer que nuestro coche no funcione correctamente, e incluso provocar averías aún más incómodas y, sobre todo, costosas.
¿Qué puedo hacer para evitar averías en mi diésel y solucionar el problema del filtro de partículas?
Cómo regenerar el filtro de partículas de un diésel
Los diésel modernos incorporan diferentes técnicas de regeneración del filtro de partículas que, en condiciones normales, deberían entrar en funcionamiento periódicamente para evitar la obstrucción del filtro. Simplificándolo muchísimo, la regeneración del filtro de partículas suele aplicarse manteniendo un régimen del motor elevado y constante, durante un tiempo determinado, lo que eleva la temperatura de los gases de escape y facilita la incineración de los residuos acumulados en el filtro. El problema es que utilizando nuestro coche poco, y únicamente en trayectos cortos, el motor encuentra dificultades para aplicar un ciclo de regeneración automático completo.
Si utilizamos nuestro coche para desplazamientos permitidos por el estado de alarma, por nuestra propia conducción podemos contribuir a la regeneración del filtro de partículas. Una vez hemos alcanzado una temperatura adecuada del motor (mucho ojo, que esto también requiere un tiempo determinado de conducción), podemos intentar mantener el régimen del motor más elevado, circulando en marchas más cortas, para que se alcancen mayores temperaturas en los gases de escape y se facilite la limpieza del filtro. Este mismo consejo será muy útil si durante todo el estado de alarma hemos tenido parado el coche, para tenerlo en cuenta en el primer desplazamiento que hagamos en coche cuando finalicen las restricciones.
No obstante, lo más útil en este y otros muchos casos, es leer el manual de usuario de nuestro diésel. En él se explicará el funcionamiento de la regeneración del filtro de partículas de nuestro diésel. Y es muy probable que veamos que existe algún testigo en la instrumentación que nos indica que ha entrado en funcionamiento la regeneración automática del filtro. De esta forma, podremos saber si el filtro se está regenerando, en cuyo caso también podremos mantener el motor encendido al llegar a nuestro destino, o circular durante unos minutos, para evitar que el ciclo de regeneración se corte y asegurarnos de que el filtro de partículas de nuestro diésel se ha regenerado correctamente.
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