El estado de alarma declarado para evitar la propagación del coronavirus no solo nos ha tenido encerrados en nuestro domicilio, también ha hecho que nuestros coches pasen días, incluso semanas, completamente parados o, en algunos casos, haciendo trayectos muy cortos. Sin lugar a dudas esta situación dista mucho de ser la ideal para un diésel y, por extensión, para cualquier coche. Durante estas semanas hemos intentado aconsejaros para anticiparos a posibles problemas. Pero en ocasiones eso no es suficiente. Por eso hoy os hablaremos de una situación muy común, el encendido de un testigo que revela posibles problemas en el filtro de partículas de tu diésel y, sobre todo, qué podemos hacer al respecto.
El testigo que revela problemas en tu diésel
Estos días recibía una llamada de la familia en la que me contaban, con preocupación, que mientras conducían, en su diésel se había encendido el testigo que ilustra esta entrada. Y sabemos que esta situación se está repitiendo bastante estos días. De hecho ya os avisábamos de ello hace un mes y os contábamos cómo evitar averías en vuestro diésel por tenerlo parado.
¿Por qué se obstruye el filtro de partículas y la EGR?
Además de ser algo habitual estos días, y razonable por las condiciones en las que hemos utilizado, o no utilizado, nuestros diésel, hemos de deciros que por suerte no suele revestir mayor gravedad. Los diésel modernos son cada vez más complejos, están dotados de toda una suerte de sistemas anticontaminación que contribuyen a hacer que sean más limpios, pero que también requieren de un mantenimiento y, en el peor de los casos, son propensos a fallos y averías.
En un coche que permanece mucho tiempo parado y que cuando se ha encendido ha sido para realizar trayectos muy cortos, incluso en parado, se pueden producir obstrucciones en la válvula EGR y el filtro de partículas, elementos comunes de los diésel modernos. Estos sistemas han sido diseñados para regenerarse, para de alguna forma «limpiarse» y evitar la obstrucción. Pero el uso de nuestros coches al que nos ha llevado el confinamiento evita precisamente que se produzca esa limpieza.
¿Cómo resuelvo el problema de mi diésel?
Generalmente nuestro problema puede resolverse de forma sencilla. Lo primero, y más importante, será evitar cualquier trayecto innecesario y, sobre todo, que incumpla las excepciones previstas que nos permiten desplazarnos en nuestro coche. Lo segundo, si nos ha saltado este testigo, será evitar encendidos del motor de unos minutos, y también hacer trayectos cortos.
Lo tercero, intentar aprovechar un trayecto esencial y permitido, como acudir al trabajo, para intentar hacer un trayecto más largo y también mantener el régimen del motor un poco más alto, siempre con el motor a temperatura de servicio, y utilizando marchas cortas, y así forzar la regeneración de los sistemas anticontaminación.
Por desgracia, este no es el único problema en nuestros coches, ni el más habitual, estos días. El más común, sin duda, es el que tiene que ver con un coche que no arranca, por una batería descargada. Por eso os hemos hablado de los mantenedores de batería, y de cómo utilizarlos, así como de los arrancadores portátiles.
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