Hay que reconocer que la preparación del Peugeot 2008 DKR no ha sido la adecuada, después de que los problemas con el diseño del coche y la fiabilidad redujeran las jornadas de test a prácticamente la mitad de lo que Bruno Famin, junto al resto del equipo técnico de Peugeot Sport tenía previsto. Es por ello, que jornadas un tanto de trámite como el shakedown previo al comienzo de la carrera y la primera etapa, que suele ser de transición, han cobrado mucha importancia en el caso del equipo del león.
Ninguna de las tres unidades del 2008 DKR ha mostrado problemas de fiabilidad y tan sólo el pinchazo de Stéphane Peterhansel hacía sonar las alarmas dentro de la carpa de los galos. Carlos Sainz era en esta primera etapa el Peugeot más rápido (Peterhansel era décimo y Despres 33º), sobre un terreno que el bicampeón del Mundo de Rallyes conoce perfectamente ya que precisamente Villa Carlos Paz es la sede de la prueba del WRC donde Sainz consiguió su última victoria en la categoría.
Ha sido una etapa muy rápida y más favorable a los coches con tracción a las cuatro ruedas que a los que llevamos dos ruedas motrices debido a que había muchos ángulos. El coche no nos ha dado ningún tipo de problema, esto acaba de empezar.
El madrileño terminaba el día octavo, a dos minutos y seis segundos del ganador de etapa y primer líder de este Dakar, el Príncipe qatarí Nasser Al-Attiyah. 126 segundos en una especial que contaba con 170 kilómetros contra el crono y que a la postre es uno de los terrenos donde los tracción total se desenvolverán mejor que el buggy dos ruedas motrices de Peugeot, que tendrá que esperar a los terrenos más rotos y el fuera pista para explotar todas sus características.
Obviamente ser superado por los Mini de Nasser y Orly Terranova o por la Toyota de Giniel de Villiers no parece una sorpresa, algo que previsiblemente volverá a suceder mañana, durante la etapa más larga del rally (518 kilómetros) que unirá Villa Carlos Paz y la localidad de San Juan. La sorpresa llegaba al ser superado por la Renault Duster de Emiliano Spataro o por el también buggy dos ruedas motrices de Robby Gordon, que ha aventajado en más de un minuto a Sainz.
Ahí precisamente es donde surgen las primeras dudas. A estas alturas creo que nadie discutirá que las capacidades al volante de Carlos Sainz son superiores a las de Robby Gordon, pero entonces, ¿cómo ha podido perder 62 segundos en unas especiales que al madrileño no le son desconocidas cuando precisamente el Peugeot 2008 DKR fue concebido para reducir esa brecha que actualmente hay entre los 4×4 y los 4×2 en este tipo de terrenos?
