Tres días de test y de nuevo hoy el MP4-30 no ha podido completar la jornada de entrenamientos de pretemporada. De nuevo con Fernando Alonso al volante del McLaren-Honda, el coche ha mostrado mejor cara, mejorando sensiblemente el sonido proveniente del propulsor V6 Turbo japonés que anunciaba durante el domingo y el lunes problemas con la electrónica y el turbo.
Hoy, con la lluvia haciendo acto de presencia y habiendo cambiado la mayor parte de los componentes mecánicos, el monoplaza de los de Woking ha completado 32 vueltas, 20 giros más de los que ha conseguido sumando los dos días de test invernales anteriores. Tal y como indican desde dentro de la escudería, se está experimentando problemas de juventud, problemas que se están viendo amplificados al considerarse un concepto y un diseño radical. Algo similar a lo que ya ocurrió el año pasado con el RB10 y sus problemas de sobrecalentamiento con la unidad de potencia de Renault.
Mientras que el resto de equipos siguen rodando, un problema de refrigeración ha dado por finalizada la última sesión del piloto asturiano sobre el asfalto del trazado andaluz. Si estos días se ha pedido tranquilidad ante la falta de fiabilidad, tras apenas 44 vueltas en tres días y un ritmo todavía lejos de la cabeza no se puede lanzar tampoco las campanas al vuelo.
Hemos tenido una pérdida de presión de en el sistema de refrigeración y hemos sacado la unidad de potencia para su inspección. Eso es un proceso largo, por lo que termina la jornada de hoy
