Más allá de lo desconcertante que han resultado los primeros tests de pretemporada para la escudería de Woking, una de las situaciones más sorprendentes es la ausencia de un patrocinador principal o socio comercial que aporte recursos económicos para invertir en el desarrollo del coche durante la temporada. Aunque desde McLaren afirmen que el presupuesto para los próximos años goza de buena salud, no es menos cierto que la autogestión en los deportes a motor ha resultado contraproducente en la mayoría de los casos.
En la presentación pública del MP4-30 quedó en evidencia que todavía no hay un patrocinador importante involucrado en la escudería, aunque sobre el papel tengan todos los elementos para ser uno de los mejores equipos del campeonato. A pesar de la decadencia de los dos últimos años, desde la salida de Vodafone, McLaren tiene una brillante trayectoria y su nombre ha estado asociado a grandes marcas comerciales, de allí que resulte, cuanto menos incomprensible la falta de apoyo en tal sentido.
Por otra parte, las escuderías Mercedes AMG, Ferrari, Williams y Red Bull, principales candidatas a las victorias, podios y puntos; exhiben una gran publicidad que les garantiza fortaleza en sus presupuestos y además de ello, se advierte que sus respectivos departamentos de ventas y mercadotecnia se mueven constantemente para atraer nuevos inversionistas.
En tanto McLaren debe apelar a otros modelos de financiamiento, alejados del que proporciona una marca de impacto a nivel comercial. Se entiende que Honda es socio, pero también es proveedor así que su aporte tecnológico estará orientado a su propio beneficio como constructor de coches de calle. Aunque resulte más extraño que ninguna empresa japonesa avale el retorno de sus compatriotas a la Fórmula 1.
También es para pensar que tanto Jenson Button como Fernando Alonso, campeones mundiales, no resulten elementos atractivos para lucir publicidad. Ambos, durante los últimos años, han promovido una buena cantidad de productos y cuando se pronosticaba que la «lluvia» de marcas comerciales atestarían los espacios en McLaren, aparece el MP 4/30 sin mostrar siquiera algunos colores corporativos que promueva alguna incertidumbre. Nada.
En sus declaraciones, Eric Boullier y Ron Dennis, máximos jefes de McLaren, han argumentado que la ausencia de un patrocinador principal se debe a una decisión empresarial ya que la estrategia pautada es que los socios comerciales y la escudería permanezcan juntos a largo plazo. Sin embargo, al parecer la tarifa por exhibir publicidad en el McLaren Honda está al nivel de una «apuesta segura» y el proyecto, ahora mismo, está un tanto lejos de convertirse en eso.
En los tests, Ron Dennis comunicó la posibilidad de cambiar próximamente la decoración del MP 4/30 según los colores de un patrocinador principal, el cual estaría por cerrar un acuerdo. El detalle está en que ya son varios los rumores que se han desvanecido, incluyendo los que aseguraban que empresas como Sony, Gillette, Rexona y Movistar estaban en Woking. Sin embargo, en el box de McLaren ni siquiera apareció algún logotipo reconocible.
Es de considerar que McLaren, aunque sea un constructor de coches de alto rendimiento y además sea un gran proveedor de tecnologías; en la Fórmula 1 su solidez financiera no está al nivel de Mercedes AMG ni de Ferrari, escuderías que pueden meterse las manos en los bolsillos sin la preocupación de sacrificar los presupuestos de sus otros departamentos. Evidentemente, McLaren cuenta con el apoyo oficial de Honda, pero sigue siendo un equipo privado que depende de socios para poder avanzar.
La Fórmula 1 es el deporte más costoso del mundo, así que observar a McLaren, la cual está en el ojo del huracán a nivel mediático, sin exhibir publicidad sigue pareciendo desconcertante y más cuando la principal causa de la desaparición de muchas escuderías en los últimos años ha sido la carencia de un patrocinador principal.
