Afortunadamente, cada año hay algo en qué fijarnos para la nueva temporada de F1, y este 2015 no nos vamos a aburrir,… en ese sentido. A las evoluciones lógicas que todos deseamos ver en equipos como Ferrari o Red Bull, para ver si pueden plantar cara a Mercedes y su cuadrilla (me refiero a Williams y a la estrenada Lotus-Mercedes), se suma McLaren-Honda en un binomio que, de momento, no deja de ser una ensoñación y exaltación de tiempos pasados, con una buena plantilla de pilotos, muchas esperanzas, y más incógnitas, todavía. ¿Qué podemos esperar de McLaren este 2015? ¿Qué esperan sus pilotos y qué puede ser realista?
Opción 1: un nuevo Brawn GP
En 2009, un equipo desguazado que antes era Honda, y que se recicló en Brawn GP con unas pinceladas de Super Aguri (digamos, el Honda ‘B’). Heredó la infraestructura del antiguo Honda, montó motores Mercedes y rescató a dos pilotos al borde del abismo y la jubilación como eran Jenson Button y Rubens Barrichello. El genio de Ross Brawn y la herencia recibida, más, seguramente la motivación extra de los dos pilotos «renacidos» le dieron el título más improbable de la historia a la escudería con éxito más efímera de la, de nuevo, historia del deporte. Jenson Button se revalorizó completamente al lograr el campeonato, pasando luego a McLaren. ¿Puede ser una sorpresa este McLaren-Honda, de verdad?
Opción 2: mucho ruido y cero nueces
El pasado glorioso de McLaren-Honda, la alargada sombra de Ayrton y Alain, la teórica infinitud de recursos de Honda, el espíritu guerrero, la experiencia y la motivación de dos pilotos maduros y que necesitan renacer… todo eso, junto a la firma de calidad de McLaren nos promete que, durante esta temporada, el binomio conseguirá éxitos. Pero luego, a la hora de la verdad, el esfuerzo resulta ser un fracaso, y Honda pasa, de nuevo, por una época de muchas esperanzas, y cero (o casi cero) resultados. ¿Puede ser un rotundo fracaso esta aventura?
Opción 3: al tercer año, título al bolsillo
La realidad cae con aplastante dureza sobre todos nosotros y, en 2015, pasaremos por una travesía por el desierto que, a ojos de los españoles, es una nueva temporada a cero para Fernando Alonso. La escudería se sobrepone a las dificultades iniciales, va cumpliendo objetivos terminando en los puntos, aprobando en fiabilidad, y desplegando poco a poco toda la potencia de su unidad. Un par de podiums y la amenaza de ganar alguna carrera nos dejan al final de 2015 con ganas de más, que en las dos temporadas siguientes se traduce en victorias en 2016, y título mundial en 2017.
Sea como sea, la incógnita está ahí. McLaren-Honda seguro que da que hablar, y no será la primera, ni la última vez que nos planteemos a dónde puede llegar este equipo. Yo, por lo menos, veo más probable la aburrida opción 3, pero no me disgustaría ver de nuevo una opción 1, de cómo una escudería rompe el status quo y nos da una temporada alucinante, como fue en 2009. Ahora bien, ¿Alonso, o Button? Os lo dejo a vosotros.