Empieza una nueva temporada, y Fernando Alonso sigue abriendo canales de comunicación con los fans. Este canal, en concreto, no es nuevo porque ya hace tiempo que sube vídeos en su cuenta en YouTube, pero parece que ahora el asturiano le quiere dar un nuevo aire y propone nuevas cosas para tratar de conectar más con nosotros. Empezó con Twitter (no quiero decir que fuese el primero), abriéndose un poco más, mostrando al mundo quizás cómo es él de una forma más directa y sin tanto intermediario. O a lo mejor solo es ua estrategia suya para mejorar su imagen. Eso nos tendría que dar un poco igual, opino.
En este canal de YouTube, según dice el propio Alonso, irá contando cosas a lo largo de la temporada, propondrá retos, los recibirá (¡no sabemos si los cumplirá!), y responderá preguntas de los aficionados. Me parece una estrategia que llega en un momento en el que se está planteando, desde otros frentes y con otra intención, que la Fórmula 1 necesita a YouTube como revulsivo. Ya hay varias voces que claman por un YouTube lleno de clips de Fórmula 1 (Autosport es una voz, la otra que escuché es la de Antonio Mesquida en un programa de Movistar F1, y la tercera voz es la de la lógica) dejando atrás esa vetusta imagen de la FOM persiguiendo a todo cuando aficionado que sube 20 segundos de los que, para él, es la experiencia de su vida.
Creo que la F1 necesita estar en las redes sociales como institución, como campeonato, como deporte, igual que otros deportes lo están. Perseguir al aficionado que cuelga un vídeo corto es contraproducente, y solo redunda en que esos mismos aficionados vean a la FIA y a todos los organismos reguladores (o por decir un nombre propio, a Bernie), como los tíos Gilito del deporte. Nadie persigue los vídeos de rallyes, ¿verdad? Está claro dónde se quiere y no se quiere poner el esfuerzo en ganar dinero a espuertas. Y Fernando Alonso, sea casualidad, o no, sabe que él también es F1, y que sus vídeos son libres.
Desde aquí le hacemos llegar el reto de que haga más vídeos en este sentido:
