Con Brasil y el Safari prácticamente descartados al completo y con China realizando grandes esfuerzos para tener en el futuro a corto plazo una prueba del Mundial de Rallyes, una nueva alternativa ha surgido en el horizonte. Tras años realizando numerosas propuestas, China ya ha pulido su prueba candidata (al menos al promotor le convence) y a ella parece que se sumará el regreso del Rally de Japón.
Fuera del WRC desde el año 2010, la cita nipona tuvo gran importancia en el pasado por la participación en el Campeonato del Mundo de firmas como Mitsubishi, Suzuki o Subaru, sin embargo, con la crisis económica azotando desde el principio al país del sol naciente, la desaparición de las marcas niponas del automovilismo internacional propició la salida de la prueba del calendario.
Ahora, con Toyota de nuevo interesada y con el resto de fabricantes viendo en el mercado asiático una buena oportunidad para ampliar horizontes. Oliver Ciesla, promotor del WRC, asegura en una entrevista a Motorsport News la más que posible inclusión del Rally de China (con un evento con sede a sólo 60 kilómetros de Pekín) puede producirse ya en 2016 y que el Mundial de Rallyes ha puesto su mirada en el regreso del Rally de Japón en 2017, coincidiendo precisamente con la vuelta de la firma Campeona del Mundo de Rallyes en 1993, 1994 y 1999.
China es uno de nuestros objetivos y hemos invertido mucho en hacer que esto suceda. Lo que hemos logrado ahora es que vemos que la Federación China está muy preparada para tener una prueba del WRC en 2016. Estamos apoyándola para que tenga un evento comercialmente viable. Hay un lugar a 60 o 80 kilómetros noreste de Pekín. Ahora tenemos que hacer un evento candidato este año, lo que nos permitiría proponerlo para el calendario de 2016. Es ambicioso, pero es una de nuestras prioridades.
Con China habiendo solventado el problema inicial de la logística y habiendo presentado un evento cerca de la capital del país (uno de los requisitos planteados por la FIA) y Brasil prácticamente descartado al no haber cumplido con los plazos ni las peticiones, Japón tiene un año para preparar una propuesta que presentar a la Federación. No será difícil, ya que la antigua prueba que se realizaba en Hokkaido ya cumplía con los estándares.
Estamos en conversaciones con Japón y con el hecho de la vuelta de Toyota una prueba japonesa es muy atractiva y está absolutamente en nuestro radar. Como muy pronto su regreso será cuando Toyota haya regresado, que es cuando tiene sentido estar de vuelta. Esto no será hasta 2017 o 2018.