Y se confirmó lo que muchos temían. Fernando Alonso no estará en el próximo Gran Premio de Australia, ya sea porque todavía no está recuperado del accidente, porque haya miedo a las consecuencias de un segundo impacto en un corto espacio de tiempo (sobre todo tras una conmoción cerebral) o incluso para evitar las molestias que puedan provocar un viaje en avión hasta las antípodas o las largas jornadas publicitarias.
Será la primera vez en la última década que una carrera de Fórmula 1 comienza sin Fernando Alonso desde el polémico Gran Premio de Estados Unidos de 2005, donde todos los equipos que montaban neumáticos Michelin se dirigían a boxes antes de que el semáforo se apagara en Indianápolis. El domingo 15 de marzo no sólo será el comienzo de la temporada 2015 del Campeonato del Mundo, sino que también servirá para ver cómo reacciona España ante una posible Fórmula 1 sin Alonso.
Con 33 años, parece claro que el asturiano afronta su última etapa surcando los circuitos del gran circo. El año en el que se cumplirá el décimo aniversario del primer título conseguido por el ex-piloto de Minardi, Renault y Ferrari, será el primero de su regreso a McLaren, esta vez con Honda como principal. Sin embargo su debut al volante del MP4-30 deberá esperar por lo menos hasta Malasia.
Hasta entonces, la cita australiana nos servirá para medir “las ganas de Fórmula 1” que hay entre los aficionados españoles y en qué medida afecta la ausencia de Alonso. Porque no podemos engañarnos, los números y datos de la categoría en nuestro país han sido obviamente inflados por el fenómeno Alonso de hace una década. El bajón que se ha producido en el seguimiento de esta competición ya no sólo ha sido debido a los dominios de Mercedes AMG o Red Bull, sino que también ha tenido mucho que ver la ausencia de victorias del ovetense.
Ahora tenemos caras nuevas. Con Carlos Sainz Jr en Toro Rosso, los cimientos de la continuidad están echados. Sólo queda por ver si son lo suficientemente robustos. A la espera de saber si Roberto Merhi también estará con Manor Marussia F1 Team (descartado tras su fichaje por Pons para continuar en la FR3.5), la presencia del madrileño debería ser suficiente excusa para levantarse el próximo 15 de marzo a las 6 de la mañana. Eso y que una nueva temporada comienza. Es hora de demostrar que habrá Fórmula 1 más allá de Alonso.
