Según la Gazzetta dello Sport, la escudería italiana no llevará hasta Australia la versión 2015 de su propulsor V6 turbo híbrido argumentando la necesidad de establecer primeramente la posición real del motor 2014, instalado en el SF15, con respecto a sus rivales y así diseñar una estrategia para utilizar las fichas de desarrollo. No obstante, el plan conservador de Ferrari hace sospechar que la actualización del motor no es tan diferente a los V6 que llevaron los Sauber durante la pretemporada, con resultados sobresalientes.
La publicación señala que en Ferrari estarían meditando la posibilidad de disputar los cinco primeros Grandes Premios del campeonato con el propulsor 2014 antes de introducir las actualizaciones, haciendo la salvedad de que en esta temporada a cada piloto les serán asignados cuatro motores, así que habrá que sacar unas cuentas muy temprano. Sin embargo, desde Maranello aseguran que la diferencia en potencia no es muy grande de una versión a otra, así que no existe gran preocupación al respecto.
Se entiende que Mercedes AMG tiene un propulsor demasiado potente y que en Ferrari plantean evaluar el rendimiento de Red Bull y de McLaren, puntales de Renault y de Honda, sus rivales directos en cuanto a motores para determinar el uso de sus tokens, contando con que tendrán reservas para desarrollar el propulsor desde la mitad hasta el final de la temporada.
También se indica que en Ferrari están satisfechos con el rendimiento del motor V6 en su versión 2014 ya que en su configuración cliente se mostró muy competitivo en los chasis Sauber durante los tests celebrados en Jerez y en Barcelona; de allí la confianza para iniciar este año con el antiguo propulsor.
Vía | nextgen auto
