Cada vez está más claro que en cuanto tenga la posibilidad, Red Bull dejará de contar con los servicios de Renault. Con los numerosos rumores sobre la posibilidad de ver al grupo VAG motorizando a la escudería de las firmas energéticas, cada roce entre el equipo de Christian Horner y Renault parece un gota más de un vaso que puede estar cerca de rebosar. Tanto el propio Horner como Helmut Marko han lanzado duras críticas a los franceses después de los primeros entrenamientos libres.
En concreto, el director del equipo Red Bull ha hecho referencia a las promesas realizadas por Renault durante esta pretemporada. Al parecer, la marca del rombo había asegurado que los cuatro monoplazas que actualmente utilizan dichos motores contarían entre 30 y 50 caballos de potencia más. Sin embargo, la situación es muy distinta y ni Toro Rosso ni Red Bull han experimentado una mejora apreciable en este campo respecto al Gran Premio de Abu Dhabi del año pasado.
Marko ha sido aún más crítico y además de anunciar una reunión con los responsables de motores de Renault ha sentenciado que es inconcebible que un motor se rompa tras sólo 50 kilómetros después de los problemas sufridos esta madrugada por Daniel Ricciardo con el RB11 y Max Verstappen con el STR10.
El motor se ha roto después de 50 kilómetros. Tenemos una reunión el miércoles en Inglaterra. Los responsables de Renault todavía no están todavía aquí, van a llegar después de esta noche, pero esto no puede estar pasando. Que se rompa un motor después de 50 no se puede comprender.