Estaba claro que Fernando Alonso sería el protagonista absoluto de la rueda de prensa oficial de la FIA, momentos después de haber recibido luz verde tras el reconocimiento médico. Se sentaban junto a él Nico Rosberg y Kimi Raikkonen, y detrás Daniil Kvyat, Felipe Nasr y Carlos Sainz. Las preguntas, el 98% de ellas, para Fernando, y sobre el accidente. Por fin pudimos escuchar de sus labios las respuestas, que a la postre nos dejaron prácticamente igual que antes (sin saber exactamente qué pasó), seguros de que al menos nosotros jamás lo sabremos, y con algún comentario sobre cómo el equipo y su entorno llevaron los momentos iniciales de comunicación.
No fue el viento. Primera aseveración importante de Fernando Alonso, que dijo que a esa velocidad, ni un huracán lo movería. Como es normal, yo me la envaino por cualquier duda o no duda que me inclinase antes a pensar que, en alguna circunstancia el viento pudiese haber contribuido, y me alegro por hacerlo. Según Fernando Alonso, la dirección se bloqueó a la derecha y lo único que pudo hacer fue bajar de quinta a tercera y apretar los frenos, porque el golpe sería inevitable.
El matiz, lo que contrasta fácilmente y además da pie a más polémica, por la aparente contradicción, es que en la nota de prensa de McLaren se escribió textualmente «heavy steering», y Alonso habló de «locked». Cuánto de «heavy» o qué poco o mucho de «locked», ya entra dentro del terreno de la especulación. Que afirme que en la telemetría «no sale nada», solo hace que las cabezas pensantes echen humo, confusas ante tales contradicciones. No diré que no me extraña que una dirección bloqueada no salga en la telemetría, porque es raro. O nos estamos perdiendo algo, o el nivel de comunicación en inglés de Alonso es deficiente (pero también deberíamos dudar de su español), o quizás el fallo fue precisamente de los sensores que debían recoger ese fallo. Ni idea.
Fernando Alonso ha negado dos veces lo dicho por su equipo y su mánager. Ha negado la mayor con el viento, ha negado que el coche no hubiese fallado, porque sí lo hizo. También negó haber perdido la consciencia en el acto, haber hablado en italiano o creer que seguía en Ferrari, y haberse despertado en 1995. Ha dicho que a comunicación en los primeros instantes no fue precisa, y que eso alimentó la confusión.
Hay un período de tiempo que no recuerdo en el hospital, entre las dos y las seis, o algo así, pero todo fue normal debido a la medicación que te dan para ir en helicóptero, y para los tests en el hospital. Como dije, todo fue normal, no me desperté en el ’95, no me desperté hablando en italiano, no me desperté de ninguna de esas formas que salieron por ahí.
Por supuesto, la disparatada teoría eléctrica también fue negada por enésima vez. El miedo a correr de nuevo no está, se siente feliz y, estoy seguro, querrá pasar página de una vez y que nos olvidemos todos de este accidente.
No hay en los datos nada claro que hayamos visto y que podamos decir ‘esta fue la razón’. Pero está claro que tuvimos un problema de dirección en medio de la curva tres que se bloqueó hacia la derecha. Me acerqué al muro, frené en el último momento, bajé marchas desde quinta a tercera y desafortunadamente en los datos nos siguen faltando algunas partes.
Probablemente la adquisición de datos en esa área del coche en particular no está en el ‘top’, así que hay unos nuevos sensores aquí en esta carrera y hemos hecho algunos cambios en la dirección, y otras partes.
Eso fue lo más importante así que la semana pasada, en la fábrica, fue más el trabajo en el simulador tratando de explicarme todos esos nuevos sensores y todas esas nuevas partes que tendremos en esta carrera.
¿Nos quedamos satisfechos? No exactamente, pero qué podemos pedir. No somos accionistas de McLaren como para pedir más explicaciones, o una vista oral ante un juez, bajo juramento. Digamos que es bueno ver a Alonso de nuevo en el ajo, realista con cómo será esta temporada, «una de las personas más felices del mundo», según sus palabras (y eso es mucho), sin problemas físicos, que se sepa, y confiando en el equipo. Para mí, remover el accidente es un poco una pérdida de tiempo y energía a estas alturas, solo espero que haya una verdad homogénea en el fondo, y que sea algo que no vuelva a pasar. ¿Tengo dudas? Bueno, sí, pero ¿qué cambia eso?
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