A estas horas creo que habrá pocos aficionados que no sepan que los repostajes están cerca de regresar a la Fórmula 1. Una medida tomada hace casi cinco años con el objetivo de contener los costos y obligar a las escuderías a ser más eficientes ha terminado en agua de borrajas y la FOM, FIA y equipos han decidido empezar de cero. Otras decisiones como la libre elección de compuestos o los monoplazas clientes han sido las otras polémicas decisiones tomadas por el Grupo de Estrategia. Todo ello con el objetivo de coches más rápidos y carreras más emocionantes.
El semanario británico, Autosport, ha tenido acceso a las medidas y sus secretos y las ha dispuesto de forma muy clara y concisa. Otras propuestas como la de aumentar el consumo para ganar en potencia, reducir la duración de las carreras o incluso hacer dos como se hace actualmente en la GP2 o DTM, e incluso la posibilidad de introducir un tercer coche por equipo no parecen haber salido adelante.
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Neumáticos:
Los equipos quieren tener libre elección para determinar los dos compuestos que utilizarán en cada Gran Premio. La intención de Pirelli era la de aumentar el catálogo de los cuatro actuales (Súper-Blando, Blando, Medio y Duro) hasta los seis. Sin embargo, los italianos ya se han mostrado muy descontentos con esta decisión y han puesto en duda la seguridad de dicha medida de llevarse finalmente a cabo. El Grupo de Estrategia afirma que la seguridad no se pondrá en peligro y que no se permitirá entre otras cosas la utilización del Súper-Blando en circuitos como el de Monza.
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Monoplazas:
No sólo se pretende hacer coches más rápidos por medio de la potencia, sino que se trabajará para reducir el peso del conjunto. El objetivo es el de reducir entre 30 y 50 kilogramos el peso del conjunto sin obligar a los pilotos a perder peso o utilizar costosos materiales compuestos. Posiblemente la caja de cambios y la electrónica sean puntos sensibles a esta pérdida de peso.
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Repostajes:
La intención es la de permitir repostar combustible al mismo tiempo que se cambian los neumáticos, tal y como se realizaba en el pasado. Los equipos (Red Bull, Ferrari, McLaren y Mercedes AMG) todavía deben estudiar dicha propuesta y dar el visto bueno, algo que puede elevar los costos dramáticamente.
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Motores:
Mayores revoluciones y sonido. Se volverá a cajas de cambios de seis velocidades (más ligeras) en lugar de las de 8 actuales, algo que permitiría llegar a mayores revoluciones y una velocidad punta mayor. Con este cambio se espera además monoplazas en torno a cinco o seis segundos más rápidos por vuelta, pero también significará un mayor consumo. Todos los equipos trabajarán para cambiar el diseño de los escapes y de la válvula de descarga del turbo con el único objetivo de aumentar la sonoridad.
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Estética más agresiva:
Hace tiempo que se viene hablando de la posibilidad de aumentar la anchura de los neumáticos trasero, en este caso se pasaría de los actuales 360 mm a 420 mm. Los monoplazas también serán más anchos, hasta llegar a los dos metros, con frontales y alerón traseros más grandes y la utilización de endplates dobles. Al Grupo de Estrategia le ha gustado más la propuesta realizada por Ferrari hace unos meses.
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Menos ayudas a los pilotos:
se desea la retirada de todo el software que se utiliza para el procedimiento de las salidas. Los pilotos pasarían a controlar ellos mismos el accionamiento del embrague.
Vía | Autosport
