El pasado miércoles, la directiva del equipo Lotus anunció que el piloto inglés Jolyon Palmer estará tras el volante del Lotus E23 Hybrid de Romain Grosjean durante la primera práctica libre del Gran Premio de Austria y también lo hará en las primeras sesiones de las últimas cuatro carreras que se disputarán en Europa. No tardó mucho en reaccionar Grosjean ante la novedad y de inmediato declaró que tal situación dificulta su desempeño ya que a él le corresponde evaluar y ajustar los nuevos componentes aerodinámicos que se utilizarán en la carrera y resulta que recibe su coche con una puesta a punto según las preferencias de otro piloto.
Añadió que entiende el interés económico por Palmer, pero a estas alturas de la temporada, los equipos que están por encima de Lotus no utilizan a sus reservas en las primeras sesiones libres porque ya no es tiempo de alquilar coches, solo los pilotos titulares logran los valiosos puntos y por eso a ellos se les concede la prioridad. Sin embargo, Palmer rodará en el Red Bull Ring, en Silverstone, en Hungaroring, en Spa-Francorchamps y en Monza. En sus declaraciones, Grosjean también reflejó su molestia porque, por contrato y aporte financiero, su compañero Pastor Maldonado no consentirá que otro piloto se suba a su monoplaza durante las prácticas.
Toda esta situación dificulta la preparación de una carrera. Las pruebas libres sirven para implementar nuevos componentes aerodinámicos, allí se tiene una idea de los cambios con respecto a la carrera anterior. Pero al perder la primera práctica es mucho más difícil encontrar la puesta a punto y realizar los cambios para la clasificación. Entiendo que en Lotus quieran asegurar su presupuesto pero solo a mí me afecta, es injusto, es muy perjudicial.
Vía | toilef1
