El Gran Premio de Austria, que volvió al calendario del campeonato del mundo de Fórmula 1 en 2014, fue una de las carreras tradicionales a lo largo de los años 70 y 80, con un gran premio inicial en 1964 y un periodo extra iniciado a finales de los años 90. Pero en todo este tiempo, solo una vez ha sonado el himno austríaco en honor a un piloto o equipo vencedor. Se trata de la edición de 1984, en la que Niki Lauda finalmente obtuvo la ansiada victoria en su casa.
En las once temporadas en las que Lauda había tomado parte hasta el momento, solo se había subido al podio en una ocasión; en 1977. El entonces aún bicampeón austríaco no había disfrutado de demasiada suerte en su carrera de casa, en el espectacular Österreichring. Los McLaren eran los claros dominadores de la temporada 1984 pero en los entrenamientos oficiales, se llevaron la sorpresa de ser batidos por el Brabham de Nelson Piquet, autor de la pole position.
Alain Prost era el primero de los dos McLaren, en primera fila, mientras que Niki Lauda solo pudo ser cuarto. En el momento de la segunda salida -la primera fue abortada-, Piquet mantuvo el liderato por delante de Prost, que se mantuvo durante 28 vueltas justo detrás. Pero el francés, con problemas en la caja de cambios, pisó una mancha de aceite mientras tenía una mano en la palanca y perdió el control de su MP4-2. Piquet había conseguido evitar una salida de pista segundos antes tras pisar la misma mancha de aceite.
Niki Lauda heredó la segunda posición, siendo además cada vez más rápido. Piquet, en cabeza de carrera, tenía problemas con los neumáticos y su ventaja sobre el héroe local era cada vez más pequeña. Era cuestión de tiempo hasta que el austríaco tomó el liderato en la vuelta 39. Parecía lanzado a por la victoria cuando problemas en su caja de cambios estuvo a punto de dejarle sin recompensa. La mala suerte en su carrera de casa estaba haciendo acto de presencia de nuevo.
En un momento dado, a Lauda le había resultado imposible meter una marcha y empezó a reducir el ritmo pero cuando muchos daban su carrera por terminada, el coche revivió y su ritmo volvió, destacándose de Piquet en 23 segundos para cuando cruzó la línea de meta por última vez. El brasileño finalizó la carrera en segunda posición, obteniendo su tercer podio del año, el primero desde sus dos victorias seguidas durante el verano.
La tercera posición fue para un Michele Alboreto que había aprovechado la potencia del motor Ferrari para remontar desde una duodécima posición en parrilla de salida hasta subirse al podio. Había sido un fin de semana difícil para el equipo de Maranello, con René Arnoux partiendo desde la décimo quinta posición y terminando en séptima, justo a las puertas de los puntos. En medio de los dos Ferrari, Teo Fabi con el segundo Brabham fue cuarto, mientras que Thierry Boutsen y Marc Surer con los Arrows completaron la zona de puntos.
En cuanto a la representación austríaca, por primera vez tuvo a tres pilotos locales compitiendo en su gran premio de casa. Niki Lauda fue el hombre que dio motivos de celebración a los aficionados austríacos pero también pudieron alegrarse del correcto debut en la categoría reina de Gerhard Berger, que a pesar de sufrir problemas con su caja de cambios a pocas vueltas del final, quedó clasificado en duodécima -y última- posición su primer gran premio en la Fórmula 1 a bordo del ATS-BMW.
Como anécdota, Berger es el único piloto austríaco y uno de los pocos de cualquier nacionalidad en haber competido en los dos trazados del Österreichring -el de los años 70/80 y el de Hermann Tilke, estrenado en 1997-. Menos suerte tuvo Jo Gartner, que tras partir desde la vigésimo segunda posición en parrilla de salida, tuvo que abandonar pasadas tan solo seis vueltas, cuando el frágil motor Alfa Romeo de su Osella dijo basta. Fue el primero de los dieciseis abandonos de la carrera.
En cuanto a Lauda, fue la última vez que completó el Gran Premio de Austria, puesto que en 1985 volvió a competir allí en su última temporada en la Fórmula 1 pero se vio obligado a abandonar. El himno austríaco pudo haber sonado en el Red Bull Ring durante la época de dominio del equipo de las bebidas energéticas en años recientes pero para cuando el Gran Premio de Austria volvió a la Fórmula 1, los cambios en la categoría reina habían finalizado ya con el susodicho dominio. Qué cosas tienen las carreras…
