El talón de Aquiles del Toro Rosso STR10, la mecánica, volvió a privar a Carlos Sainz de una gran oportunidad al forzar su abandono en el Gran Premio de Gran Bretaña 2015 cuando rodaba noveno, defendiéndose de Sergio Pérez. El piloto español perdió algunas posiciones en la salida pero el mazazo le cayó cuando ya había logrado estabilizarse en la zona de puntos.
Después de una salida discreta Sainz hubo de luchar con Daniel Ricciardo, quien le superó al adelantar su cambio de neumáticos, pero el gran número de abandonos hacía presagiar un buen resultado final a la espera de la llegada de la lluvia, que el español no pudo disfrutar en pista. El mínimo consuelo es haber abandonado por avería y no por error propio, como le ocurrió a su compañero de equipo, Max Verstappen.
A la espera de que la Scuderia Toro Rosso desvele el motivo exacto de su abandono, Carlos Sainz comentó a los periodistas españoles presentes en Silverstone que su monoplaza se apagó sin aviso previo y aunque intentó resetearlo, fue en vano. La mala colocación del coche, en plena escapatoria de asfalto, provocó además un periodo de Virtual Safety Car.
Foto | Red Bull Content Pool