Cambio de rumbo. Ayer se anunciaba que Tommi Mäkinen tomaba el mando del programa de Toyota en el Mundial de Rallyes, ahora denominado como Toyota GAZOO Racing. El finlandés tiene por delante 15 meses de trabajo para preparar el regreso triunfal de la formación nipona, o al menos conseguir poner contras las cuerdas a Volkswagen. Para ello, el cuatro veces Campeón del Mundo parece estar deseando rodearse de los suyos y quizás, Finlandia, se convierta en la nueva base de operaciones.
Sin duda algo que se sale de la línea ‘normal’ ya que las instalaciones de TMG en Colonia son muy modernas y cuentan con tecnología de primer nivel, utilizada en numerosas ocasiones por las escuderías de Fórmula 1. A falta de conocer oficialmente cuál es el lugar en el que el equipo comience a dar forma a su World Rally Car, partiendo de todo el trabajo que se ha realizado sobre la mula de pruebas del Yaris, lo que tiene claro Mäkinen es que quiere contar con gente experimentada y pilotos de primer nivel.
Dentro de estas credenciales se encuentra el ex–piloto del WRC Mikko Hirvonen. Después de abandonar la competición a finales de 2014 y ser ligado a una posible participación en el Dakar y algunos raids sueltos con X-Raid, el compatriota de Tommi Mäkinen puede aportar la experiencia necesaria para seguir desarrollando el nuevo World Rally Car. Al fin y al cabo, Mikko ha competido tanto el Ford Fiesta RS WRC como el Citroën DS3 WRC. Sin embargo, no parece que su lugar dentro del equipo vaya a ir más lejos que el de ser piloto de pruebas al igual que Sebastian Lindholm o Stéphane Sarrazin.
En cuanto a los posibles pilotos oficiales, Tommi lo tiene claro: “necesitamos un piloto que pueda ganar ya desde 2017”. Jari-Matti Latvala, Sébastien Ogier, Thierry Neuville… Esos son algunos de los nombres que pueden encajar dentro del perfil de primer piloto que el equipo busca.
Vía | Rallye-Magazin