A pesar de que las críticas se están centrando en el mal rendimiento de Honda, a nadie se le escapa que la temporada de Renault está siendo aún peor. Y es que los japoneses tienen mucho margen de mejora y aunque mínima, se está viendo una clara tendencia a evolucionar. En el caso de los franceses, parecen haber resuelto en parte el problema con la fiabilidad, sin embargo, no se ha visto que el propulsor del rombo haya ido ganando en rendimiento con el paso de las carreras.
Esto ha sido traducido por el jefe deportivo de Honda, Yasuhisa Arai en que actualmente el motor de los nipones ya se encuentra por delante del de los galos, con una ventaja de unos 25 CV de potencia. Las mejoras introducidas, muchas de ellas dentro del margen de la seguridad y de la fiabilidad, sumadas a los tokens gastados, han hecho que la brecha se haya cerrado en parte. Incluso con Mercedes AMG, con los que dicen tener una diferencia de entre 40 y 50 CV de desventaja, nada comparado con los 100 CV de los que se hablaba en la primera mitad de temporada.
En cuanto a Ferrari, Arai ha declarado a Autosport que el objetivo era haberles alcanzado en Spa con la mejora en el motor de combustión interna, sin embargo, no se ha logrado y actualmente están en unos 30 CV de potencia por detrás de los italianos. No es la primera vez que Arai se muestra tan optimista, esperando dar caza a los dos primeros fabricantes antes de final de año, pero salir desde el fondo de la parrilla tras haber acumulado 105 puestos de penalización como en la cita belga sigue poniendo en entredicho la imagen de Honda. Monza dictará si la evolución ha sido tan grande como dicen dentro del equipo.