Valedero para el Campeonato Regional Gallego, el Rally de la Coruña se ha cerrado con lo que sin duda será recordado como un fin de semana trágico para este deporte. Obviamente poco ha importado que la prueba deportiva se haya visto finalmente suspendida después de la terrible confirmación oficial de 6 espectadores fallecidos y más de una decena de heridos tras la salida del Peugeot 206 XS con el dorsal 39.
La tragedia sucedía esta tarde, en torno a la media tarde cera de la iglesia de Paleo, por las carreteras del municipio del Carral. A pesar de que los aficionados no estaban visiblemente incorrectamente colocados (según declaraciones de un Guardia Civil la zona estaba restringida al público), una serie de catastróficas desdichas ha llevado a que tras la salida de pista del Peugeot, el piloto perdiera el control y el vehículo terminara arrollando a más de una veintena de espectadores.
Poco más puedo decir en este momento, y como representante de los rallyes de este medio, Diariomotor Competición, sólo puedo trasmitir todo el cariño y respeto (sobre todo respeto) a los allegados y familiares de fallecidos y heridos, así como al piloto, copiloto y organización del rally. Descansen en paz. Toca el momento de trabajar en pos de la seguridad del automovilismo y tratar de que juntos, aficionados, medios de comunicación y amantes de este deporte, este tipo de tragedias no vuelva a ocurrir.
