Sebastian Vettel consigue una victoria sin oposición en una carrera llena de incidentes

Sebastian Vettel ha conseguido una victoria aplastante, dominadora y que da oxígeno al campeonato en el Gran Premio de Singapur, la primera victoria de Ferrari en el trazado desde la victoria de Alonso en 2010. En el podium lo acompañaron Daniel Ricciardo y Kimi Raikkonen, mientras que por detrás ha habido más que palabras en muchos frentes diferentes. Sobre todo, destacar la gran cantidad de fallos eléctricos en carrera, algo sin precedentes, que dieron al traste con muchas estrategias. Aunque quizás lo que más ha marcado la carrera ha sido la aparición de un espectador en medio de la pista, que ha provocado la salida de un Safety Car que duró, quizás, demasiado.

El inicio de la carrera nos recordó al pasado, con Vettel poniendo tierra de por medio, pero en realidad lo que pasó es que el alemán sacó unos 5 o 6 segundos de ventaja para inmediatamente conservar, decidido a ir a dos paradas, la estrategia ganadora que han compartido los primeros clasificados. Justo tras el primer cambio de neumáticos llegaba el primer incidente grave, un golpe entre Felipe Massa y Nico Hulkenberg que dejaba a este último fuera de combate y a Massa con un pinchazo que lo obligaba a pasar por boxes. Posteriormente, Hulk sería sancionado con tres posiciones en la parrilla de salida del GP de Japón, y dos puntos en su licencia. No es que esté muy de acuerdo con esto por la forma en que Massa salió de los boxes, pero habrá que creer a los comisarios.

Tras el Safety Car virtual, llegó el real y estuvo en pista hasta la vuelta 19, bastante largo, y en el relanzamiento a Carlos Sainz le jugó una mala pasada la electrónica, quedándose en punto muerto y perdiendo varias posiciones. Un fallo común, porque posteriormente eso le sucedió a Massa. El golpe de teatro y puntilla del fin de semana vino cuando a Lewis Hamilton le falló su Mercedes: pérdida de potencia y agonía durante un puñado de vueltas en las que llegó a rodar 10 segundos más lento que la cabeza. Finalmente, el propio Hamilton pedía la retirada y todo se saldaba con un nulo, primero de la temporada.

Al poco tiempo, y tras rodar consistentemente en la zona de puntos, Fernando Alonso abandonaba por un problema de sobrecalentamiento en la caja de cambios, tal y como justificaban desde McLaren. Una verdadera pena porque esta carrera estaba claro que ambos McLaren iban a puntuar, o al menos estar muy cerca (visto lo visto más adelante, casi podría asegurar que estaría al pelo). Y entonces pasó en carrera lo que parecía imposible, y superado tiempo atrás: un tipo en bermudas y camiseta aparece dando un paseo por la pista. ¡Increíble! Nuevo Safety Car, y más emoción de cara al final con los nuevos cambios de neumáticos.

El relanzamiento de la carrera fue un verdadero caos con el Manor de Rossi en una posición ilógica que, lógicamente, no fue su culpa pero que molestó a pilotos como Kimi Raikkonen y muchos otros, propiciando, quizás, los diversos toques y pasadas de frenada que vimos y que, seguro, fueron determinantes para que Jenson Button se liase un poco y rompiese su alerón delantero contra el difusor de Pastor Maldonado.

Y llegamos a la parte más emocionante de la carrera, cuando los dos Toro Rosso montaban el neumático súper blando y volaban sobre la pista, adelantando coches a diestro y siniestro y apurando ese set de neumáticos (nuevo para Sainz, usado para Verstappen) para tratar de subir posiciones y sumar puntos. Aparte de la emoción de las maniobras, nos quedamos también con un momento tenso entre los dos pilotos, cuando desde el muro se le pedía a Verstappen que dejase pasar a Sainz para intentar pasar a Checo Pérez y el holandés se negaba. Es al menos extraño porque en ocasiones anteriores sí que Sainz dejó intentar la maniobra a su compañero, pero habrá que esperar acontecimientos. Hay que decir que Max Verstappen empezó la carrera cediendo una vuelta por un problema en el cambio.

Seguimos, y hablaremos también de los Mercedes, los españoles y más.

Clasificación del Gran Premio de Singapur 2015