Anacrónico, polémico, rebelde. Jacques Villeneuve fue un soplo de aire fresco cuando llegó a la Fórmula 1 por ser todo lo que en esa época no era un piloto de la categoría reina. Un hombre sin ningún tipo de problema para decir lo que le pasaba por la cabeza pero con el talente suficiente como para tener credibilidad. No en vano estuvo a punto de ganar su primer gran premio en 1996 y fue campeón en tan solo su segundo intento. Su casco, el reflejo de una personalidad un tanto excéntrica pero más humana de lo que en ocasiones aparenta.
El piloto canadiense, que en realidad empezó compitiendo con licencia andorrana cuando no tenía edad suficiente para podrla tener en su país natal, tiene un diseño de casco poco usual por la cantidad de colores que utiliza. Lo más convencional sea seguramente la parte superior azul, muy común en la época. Esta parte es precisamente la más visible del casco y su hendidura forma una «V» estilizada con el rosa que la franquea.
Gilles Villeneuve tenía también una «V» estilizada en su casco y ese es precisamente uno de los dos elementos clave del casco. Esta letra, la inicial de su apellido, la podemos ver con una raya de color rosa pastel, un color muy poco utilizado por los pilotos de carreras, que rodea todo el casco. Pero no termina ahí el casco, que tiene aún tres colores más con un espacio muy visible para cada uno de ellos.
La sección amarilla del frontal del casco es otra de las más visibles. Puesto que el azul ocupaba la parte superior y el rosa rodeaba todo el diseño, el amarillo sirve para dejar una parte frontal algo más limpia y eliminar el exceso de color de una sección que necesita ser algo más simple. Esta parte amarilla también acaba rodeando el casco aunque lo hace de forma testimonial, con una pequeña línea entre lo que se considera la parte superior del casco -azul y rosa- y lo que se considra la parte inferior del casco -verde y rojo-.
Separando cada una de estas parejas de color hay una línea negra que ayuda a delimitar cada uno de los colores para que el resultado sea algo más ordnado. En cuanto al color verde y el rojo que finaliza el diseño del casco, ambos siguen el mismo patrón de la línea superior aunque de forma algo más suave, más redondeada. Esto le da al casco una imagen como de capas de colores, una sobre la otra.
A lo largo de su carrera deportiva, Jacques Villeneuve ha mantenido el diseño de su casco intacto, siendo uno de los últimos pilotos en hacerlo. De hecho, el campeón del mundo de Fórmula 1 de 1997 está aún en activo y podremos ver su diseño en movimiento en la Fórmula E desde finales de este mismo año. Los únicos cambios reales han sido los logos de los patrocinadores, como es habitual.
Sobre el origen del diseño del casco, el propio Jacques lo dibujó cuando era niño -de ahí el uso de tantos colores y del tono pastel del rosa tan poco común- y no quiso alterarlo cuando empezó a utilizarlo tras haber empezado a competir con el casco de su padre. Según el propio piloto, la forma de «V» en el lateral fue una casualidad. Hay quien dice que los colores usados por Jacques Villeneuve se inspiraron en una camisa de su madre Joanne. Pudo ser involuntario…