Suzuka no volverá a ser lo mismo. A pesar de ser uno de los circuitos favoritos por parte de los aficionados y sobre todo de los pilotos, el trazado japonés siempre nos traerá el fatídico recuerdo del accidente de Jules Bianchi contra la grúa que estaba tratando de retirar el monoplaza de Adrian Sutil y que finalmente le costaba hace unas semanas la vida al joven piloto de Niza. Aun así toca reponernos y pensar en la competición y en la que será la 15ª prueba de la temporada.
Precisamente llegamos al Gran Premio de Japón con muchas preguntas. Entre ellas saber si lo de Mercedes AMG en los dos últimos domingos de carreras es sólo un aviso o se convierte en una oportunidad para la Ferrari de Sebastian Vettel. Por ahora el alemán ya ha conseguido más de lo que esperaba en una temporada de transición. Tres victorias y el cariño de gran parte de los tifosis han dado al alemán y a la escudería italiana ese empujo para salir de la espiral de negatividad y trabajar en un proyecto que les permita luchar de una vez por todas por los títulos.
Con la renovación de Sergio Pérez por Force India y la más que posible llegada de Grosjean a HAAS, quedan pocas dudas en cuanto a las alineaciones de pilotos para la próxima temporada. Dos de los que están asegurados fueron los protagonistas del pasado Gran Premio de Singapur. Y es que al ingeniero de Max Verstappen seguro que todavía le está retumbando en los oídos el sonoro “NO” que le espetó el holandés cuando le ‘sugirieron’ que dejara pasar a Carlos Sainz. Según el piloto de 17 años, de haberlo hecho, su padre “le habría golpeado las pelotas”.
Llegamos a la casa de Honda con McLaren sumada en su profunda crisis, agravada por el doble abandono en el que teóricamente iba a ser su circuito más favorable en lo que restaba de temporada y con los MP4-30 teniendo que afrontar un trazado al que previsiblemente no se adaptará nada bien. Además, la posibilidad de que Jenson Button anuncie su retirada de la Fórmula 1 a final de temporada puede dar aún más carga emocional a un fin de semana que también promete ser muy duro en el seno de Manor, anteriormente conocida como Marussia, un año y una semana después del grave accidente sufrido por el piloto que les dio sus primeros y únicos puntos en la Fórmula 1.
Con la ferviente hinchada nipona detrás, el Circuito de Suzuka nos deja algunas de las curvas más desafiantes y favoritas por parte de los pilotos. Siempre muy difícil encontrar los límites en él, además de una primera zona muy técnica, en la que destacan la doble curva de derechas tras la recta de meta, seguida por las famosas S, también encontramos otras como la curva de cuchar/horquilla que es un lugar de adelantamiento para los más audaces o la 130R, donde hemos podido ver grandes movimientos como el realizado por Fernando Alonso sobre Michael Schumacher.
Un circuito en el que además de contar con una buena velocidad punta debido a las largas rectas, también es básico tener una buena aerodinámica por la presencia de curvas muy rápidas y tracción, debido a la horquilla que antes mencionaba y la chicane previa a meta. Precisamente en dicha recta estará la única zona de DRS disponible, un lugar en el que el pasado nos dejaba algún que otro adelantamiento y que tal vez este año, con la gran diferencia de velocidades pueda ser un punto en el que los equipos motorizados por Mercedes-Benz partan con ventaja.
Pirelli ha decidido utilizar los dos compuestos más duros de su catálogo, medio y duro en una pista que debido a su asfalto (muy abrasivo) y la cantidad de curvas rápidas presentes en su diseño obliga a descartar desde el principio los juegos más blandos de los italianos. Precisamente este es uno de los circuitos por lo que los hombres de Paul Hembery no quieren ni oír hablar de la libre elección de compuestos por parte de los equipos.
La carrera, programada a 53 vueltas a los 5,807 kilómetros que componen Suzuka, no tiene en principio muchas posibilidades de ver lluvia. En todo caso algún chubasco suelto. Cuando sí se espera que el agua haga acto de aparición será el viernes, durante los entrenamientos libres, jornada en la que se esperan grandes tormentas y en la que será muy complicado ver a los pilotos rodar salvo a los jóvenes de Toro Rosso que siguen con su filosofía de aprender de todo tipo de condiciones. Como ya hemos dicho, es una pista en la que es muy complicado encontrar los límites, por lo que deberán tener cuidado para no dar demasiado trabajo a los mecánicos. Por el momento, el puesto número 12 ha sido renovado y ya luce una pluma mucho más grande y que no necesita entrar en pista para retirar los coches que hubiera servido para que Bianchi siguiera entre nosotros. Descanse en paz.