El presidente de la FOM comunicó a los medios asentados en Sochi que no fue capaz de mediar en el asunto Red Bull porque más allá de entendimiento, las partes solo hablan de obligación y así no se llegará a ningún lado. Manifestó que en una reunión con Maurizio Arrivabene, jefe de Ferrari, se le explicó que la escudería siempre se reserva los motores oficiales, por ello todos sus clientes utilizarán en 2016 la última evolución del propulsor 2015. Ese sería el trato, incluyendo a Red Bull si desea integrarse.
Tanto Mercedes como Ferrari están aplicando una filosofía particular que debe respetarse porque no están haciendo nada malo al salvaguardar sus intereses. Mercedes esquivó la sociedad con Red Bull al unirse a Manor para el 2016, un equipo débil, evitando el riesgo de ser derrotados por una escudería cliente. Y es que Red Bull ya tiene el precedente de vencer al equipo oficial Renault mientras ambas escuderías utilizaron el V8 RS27.
Por su parte, Ferrari jamás ha compartido motores oficiales con ningún equipo y difícilmente lo harán ahora con Red Bull. Ecclestone entiende la postura de Dietrich Mateschitz con la complicada situación de su escudería y la posibilidad de retirarse al verse obligado a participar en los próximos campeonatos en desventaja.
En palabras de Bernie Ecclestone:
No puedo obligar a nadie a aceptar lo que otros digan. Si yo fuera Dietrich Mateschitz estaría acordando con Ferrari. La posición de Mercedes fue clara con respecto a Red Bull. No puedo hacer nada. No tengo ningún motor para la venta. Todas estas personas no están haciendo nada malo, siguen las reglas, eso es todo. Si Red Bull se retira será malo para la Fórmula 1, pero si ellos quieren participar en 2016 deberían escuchar mis consejos.
Vía | nextgen auto