Lo ha dejado claro en varias ocasiones, Kubica quiere volver a probar las sensaciones de pilotar en un circuito, ser oficial de fábrica y el volver a un escenario en el que ha crecido tanto como persona como piloto. Con la opción de seguir en los rallyes abierta, pero en esta ocasión en forma de programa reducido en WRC o en el WRC2 (categoría en la que ya fue campeón en 2013), el polaco ya ha recibido sus primeras ofertas para volver a las pistas.
Con la opción de la Fórmula 1 muy difícil debido a las limitaciones que sufre el polaco en su brazo derecho por la cual no tiene prácticamente movilidad en el codo y en la mano, todo parece apuntar hacia los turismos o los GT’s. En el pasado, Kubica ya rechazó una oferta para competir en alguna prueba del WTCC al volante de uno de los Citroën C-Elysèe TC1 oficiales e incluso probó el nuevo Lamborghini Huracán del trofeo monomarca durante unos test privados. Sin embargo, el DTM parece la opción favorita.
En concreto se ha empezado a especular sobre la posible oferta de Mercedes-Benz a Kubica para que este pase a formar parte de uno de los equipos del Campeonato Alemán de Turismos. La firma de la estrella estaría encantada de darle el asiento del actual campeón, Pascal Wehrlein, en el caso de que el teutón finalmente afronte su paso al Gran Circo. El propio Robert ya probó en el pasado una unidad del DTM, justo antes de decidirse a probar suerte en el Mundial de Rallyes. Ahora parece ser el destino más plausible para un Kubica que ha visto como su inspiración ha decaído tras los numerosos varapalos sufridos esta temporada en el WRC.
Actualización: Fuentes cercanas han confirmado que hay interés en el DTM, pero que por el momento hay pequeñas opciones de recalar en él a la espera de conocer el futuro de Wehrlein y el baile de pilotos entre los distintos equipos. El WTCC pasa a ser el cto. de circuitos con más papeletas, siempre considerando que no hay nada oficial por el momento.