La iniciativa de que un proveedor independiente aparezca en el campeonato de 2017 continúa sumando voluntades. Bob Fernley de Force India y Franz Tost de Toro Rosso manifestaron públicamente estar a favor de una alternativa a los actuales fabricantes de motores. Y es que este ciclo de tecnología híbrida ha marcado una distancia insalvable entre los equipos, los proveedores poseen escuderías oficiales que gozan de privilegios mientras los clientes deben pagar costos elevados por unidades de potencia cuyas prestaciones lucen insuficientes para ser realmente competitivos.
Fernley y Tost declararon que votarían a favor del motor independiente a pesar de que, en el caso de Force India, mantengan una larga relación con Mercedes Benz. Ambos jefes están de acuerdo en la necesidad de disponer de un motor estándar que acabe con el negocio que tienen los grandes fabricantes en la Fórmula 1, ya que es obvio que están trasladando los costos de investigación y desarrollo a los equipos clientes, los cuales terminan pagando los platos rotos.
Según la opinión de Fernley
Force India apoyará la idea de un motor independiente, pensamos que es bueno para la Fórmula 1. Es absolutamente correcto. Tenemos que esperar hasta que sepamos todas las circunstancias para su introducción, pero creo que la propuesta es buena. La FIA y la FOM deben tomar las riendas de la Fórmula 1 y quitarle poder a los equipos más influyentes.
Por su parte, Franz Tost argumentó que los motores híbridos están resultando muy costoso, comprometiendo el presupuesto de los equipos pequeños, para que al final sean los mismos proveedores los que se beneficien en todos los sentidos. Explicó que hay un desequilibrio en la nueva Fórmula 1 ya que la alta tecnología permanece reservada para las escuderías de los fabricantes y muy poco se puede hacer con el material que proporcionan y además a un costo demasiado alto.
La nueva regla, en cuanto a los motores híbridos, es fantástica desde el punto de vista tecnológico, está orientada al futuro, pero resulta que los fabricantes están usando a la Fórmula 1 para exhibir sus adelantos, mientras los clientes deben comprar a un precio nada aceptable. Para una gran marca que fabrica coches gastar cien millones de dólares en la Fórmula 1 resultará beneficioso por la publicidad que generará en el mundo; los clientes no tenemos ese beneficio. Si la FIA y la FOM presionan para un equilibrio en los motores, Toro Rosso se sumará a la propuesta.
Vía | toilef1