Con la vorágine del Gran Premio de México, se nos había quedado en el tintero una noticia relevante. Y es que no todos los días dice adiós a su trabajo el jefe de uno de los programas deportivos más importantes del planeta motorsport. Tras 18 años de servicios dentro de la alianza Renault-Nissan, el pasado viernes Darren Cox anunciaba su adiós a Nissan.
Un bombazo en toda regla máxime si tenemos en cuenta que Cox está detrás de todos los últimos grandes pasos dados por Nissan como los programas de LMP2 y LMP3, la presencia en los V8 Supercars australianos y la exitosa GT Academy. A todo esto hay que incluir que también formó parte de las campañas de los top-ventas Nissan Juke y Nissan Qashqai.
Eso en el lado bueno porque de la batuta de Darren Cox también salieron otros proyectos muy mediáticos pero con menos éxito deportivo como el Nissan-Deltawing, el Nissan ZEOD RC o la madre de todos los fracasos deportivos en Nissan, el GT-R LM NISMO. Quizás esto último, la gota que haya colmado el vaso de la paciencia de Nissan.
En su twitter, el propio Cox comentaba que tras 18 años, abandonaba la Marina para convertirse en un pirata. Significará esto que se pondrá al frente de alguna marca «menor». Sea como fuere, este no es el único cambio en los programas deportivos de Nissan. Ben Bowlby y Motohiro Matsumura, los hombres al frente del proyecto GT´R LM NISMO han sido sustituidos por Michael Carcamo. En el caso de Bowlby, padre del vehículo, se centrará en que el coche por fin funcione.
