Despejada cualquier incertidumbre al respecto ya que el propio Yasuhisa Arai manifestó públicamente que Honda no contempla un programa para proveer motores a Red Bull Racing en 2016. Así que las reales opciones del equipo de Dietrich Mateschitz se limitan a permanecer con Renault, de forma oficial o con el motor renombrado, o sumarse a los clientes de Ferrari. Arai declaró hace unas semanas que representantes de Red Bull solicitaron formalmente motores Honda, pero al parecer el veto que ejerció Ron Dennis resultó más poderoso que la tentación de unirse a los austriacos.
Aunque la situación de Red Bull no está definida, lo más probable es que las recientes conversaciones con Renault, donde se ha bajado el tono de las amenazas y de las criticas, estén aproximándose a un acuerdo entre las partes; de allí la prudencia de Arai en este caso. Y es que si el jefe de Honda manifiesta un abierto interés por mantener un programa paralelo al de McLaren y al final no se produce, la relación entre Japón y Woking se pondría más tensa de lo que ya está.
Creo que es demasiado tarde para aceptar la propuesta de otro equipo. Todo nuestro trabajo está concentrado en McLaren así que no hay cambios en este momento. Todavía estamos muy lejos de los mejores, pero queremos confirmar la próxima temporada los progresos hechos durante este año. Ya sabemos dónde están los puntos fuertes y los débiles. Nuestro concepto es propio, ya lo hemos compartido, discutido y confirmado.
Vía | autosport