Hay mucha intrahistoria dentro de la crisis de los motores de Red Bull. La escudería de Dietrich Mateschitz siempre se ha caracterizado por medir mucho sus movimientos y a muchos les extrañó que la firma de las bebidas energéticas decidiera romper el acuerdo con Renault antes de tener seguro su proveedor para 2016. Lo cierto es que todo el mundo parece indicar hacía el mismo punto: Mercedes-Benz llegó a un acuerdo con Red Bull y después se echó atrás.
Bernie Ecclestone confirma la versión dada hace unas semanas en las que se aseguraba que Red Bull no se decidió a romper el acuerdo con la firma del rombo hasta tener seguro que los germanos le iban a suministrar motores. Sin embargo, bajo la presión de Niki Lauda y de Toto Wolff, la firma de la estrella no quiso seguir adelante.
Mercedes llegó al acuerdo de suministrar a Red Bull. Esta fue la razón por la que Renault rompió su contrato con Renault. Mercedes había dado su visto bueno y entonces cambiaron de idea. No quieren competencia. Ferrari o Mercedes no quieren competir con Red Bull.
Sin embargo, Niki Lauda ha salido rápidamente a la palestra para negar la versión dada por Ecclestone, asegurando que en la reunión del famoso apretón de manos con Mateschitz no se llegó a ningún tipo de acuerdo.
¿Él realmente dijo eso? Bernie no estaba presente en la reunión. Aquella reunión pretendía aclarar los problemas que tiene Mateschitz con Mercedes. Si él podría dejar a un lado sus antipatías. Dijo que podría. Pero nunca hemos tenido más información por parte de Renault (Mercedes quería el visto bueno de los franceses, colaborador tecnológico de los germanos) y Red Bull, por esa razón las negociaciones reales no tuvieron lugar.
Vía | Nextgen-Auto
