Si Thierry Neuville quería recuperar parte de la confianza perdida durante la temporada 2015 del WRC en el Monza Rally Show lo cierto es que no ha sido la elección más afortunada. El belga se ha visto totalmente desquiciado por unos neumáticos que no daban el rendimiento suficiente, haciéndole incluso perder casi un segundo por kilómetro en las especiales más largas. Sin el belga luchando por los triunfos, Valentino Rossi y Tony Cairoli se han repartido las victorias en el Monza Rally Show y en el Master Show este fin de semana.
Ya desde la primera especial, Autódromo 1, se veía que Neuville no lo iba a pasar tan bien como pensaba. Cairoli se colocaba como líder, incluso por delante de Alessandro Perico que en esta ocasión salía con el Ford Fiesta RS WRC. El piloto belga de Hyundai, aquí al volante de la unidad privada del equipo italiano HMI, salía a por todas a la bonita especial de Monza 1, la que se pasa a través de la Parabólica y la curva peraltada perteneciente al viejo trazado.
Neuville se ponía líder en medio del espectáculo nocturno en Monza, con Rossi ya rodando muy cerca de los tiempos del piloto del Mundial. Cairoli era tercero, pero era Andreucci, cuarto el que acaparaba los aplausos del público al hacer toda una exhibición en una especial en la que hay zonas en la que la potencia manda.
El hasta esta temporada primer piloto de Hyundai volaba en la tercera especial de las nueve programadas pero perdía el liderato al tocar uno de los pivotes, hecho que le reportaba cinco segundos de penalización y que daba la cabeza de la carrera a Valentino Rossi. También sacaba la cabeza el ex-piloto de Fórmula 1 Vitantonio Liuzzi, que con el Ford Focus RS WRC de A-Style (ex-equipo de Robert Kubica) se encontraba marcando tiempos del Top 5.
Los 44,1 kilómetros del cuarto tramo iban a ser un golpe demoledor a las posibilidades de Neuville de ganar por primera vez esta prueba que en el pasado ya consiguieron hombres como Sébastien Loeb o Dani Sordo. La décima plaza en dicha especial de Thierry, perjudicado por el rendimiento de los neumáticos (utilizaba Michelin frente a los Pirelli de la mayoría de sus rivales) y una bandera amarilla, lo apartaban de la lucha por la victoria y lo hundían en la general. Cairoli se encaramaba a la segunda plaza, a 19 segundos de Rossi.
A partir de ahí, el resto del rally seguiría el mismo guion: Neuville remontando posiciones a marchas forzadas, Rossi asegurando un nuevo triunfo en el Monza Rally Show y Cairoli sujetando con fuerza su posición del podio. Mientras tanto, Liuzzi seguía cogiendo confianza, viéndose muchas maneras del ex-piloto de Toro Rosso y Force India al volante de un World Rally Car. Perico se hundía después de imponerle una sanción de un minuto por irregularidades en su Fiesta RS WRC (algún periodista italiano echaba en cara que no se sometiera a inspección técnica el coche de Rossi en 2014) y Gigi Galli, que se encontraba haciendo las labores de coche cero con su KIA Rio para el Mundial de RallyCross rompía el motor.
Tras la novena especial, el nueve veces Campeón de MotoGP certificaba una victoria más en Monza, mientras que Neuville heredaba la segunda plaza tras una contundente recuperación y el abandono de Cairoli en el último tramo. El piloto italiano proveniente del mundo del off-road de dos ruedas (doble Campeón del Mundo de MX2), se sacaba la espinita en la final del Masters Show (cara a cara eliminatorias entre dos pilotos hasta la gran final), eliminando a Rossi en semifinales y superando a Thierry en un segundo y cuatro décimas en la gran final. El belga volvía a casa con dos segundos puestos y la frustración de no llevarse un evento en el que él era favorito.