El sábado por la noche Audi presentaba ante los medios el nuevo Audi R18 e-tron quattro LMP1 para la temporada 2016 del WEC, sin embargo, lejos de ser noticia la mutación que había sufrido el prototipo de la firma de los cuatro aros, lo era el recorte a sólo dos unidades en el caso de Porsche y Audi para las próximas 24 Horas de Le Mans. Algo que parecía apuntar a que la ‘crisis’ del Grupo VAG tras la polémica suscitada por las trampas con las emisiones contaminantes, había terminado de llegar a la competición.
La estrategia hasta el momento de Audi y Porsche había sido siempre la de alinear tres LMP1 por equipo en icónica prueba de la resistencia con el objetivo de aumentar las probabilidades, al contrario que otras formaciones como Toyota que únicamente han ido con dos. Parece claro que desde la dirección del Grupo han pedido a los departamentos deportivos controlar los gastos para ayudar a capear el temporal, algo que puede afectar también a Skoda y Volkswagen.
Recordemos que Jost Capito ya saltó a la palestra tras el Rally de Catalunya con el objetivo de acallar los rumores que apuntaban a que sólo habría dos Volkswagen Polo R WRC en 2016. El jefe de equipo de los de Wolfsbrugo aseguraba que sus tres pilotos cumplirían sus contratos y disputarían la temporada al completo del Mundial de Rallyes. Sigue sin haber novedades en este sentido, pero sí ha empezado a correr el rumor de que Capito puede verse obligado a buscar nuevos patrocinadores para hacer correr la tercera unidad, en este caso la de Andreas Mikkelsen.
Lo que puede significar ver el tercer Polo R WRC con una decoración diferente, a Skoda le puede repercutir en no disputar el campeonato WRC2 al completo. Malas noticias si tenemos en cuenta que era el equipo más competitivo dentro de la categoría con futuras promesas como Esapekka Lappi y Pontus Tidemand en pleno crecimiento y con un piloto de la talla y calidad de Jan Kopecký.
