Luca di Montezemolo ha salido al paso de las recientes declaraciones de Marchionne rompiendo una lanza a favor de Fernando Alonso, y poniendo de manifiesto que hay que saber utilizar el contexto cuando se trata de rajar de un expiloto. En realidad, no hay cosa que más moleste al público honrado que leer cómo un presidente quiere borrar un pasado que no le conviene, ensalzando el presente y futuro. Pero para evitar eso tenemos a Montezemolo que sale a recordar algunos asuntos que, quizás, Marchionne no conocía.
Marchionne proclamaba lo ferrarista de un recién llegado Vettel en comparación con lo poco «jugador de equipo» que fue Alonso a su llegada a Ferrari. Cualquiera sabe que eso es mentira, como vimos en los comentarios el otro día, porque si comparamos a cualquier campeón del mundo que llega a Ferrari, su primer día es casi religioso. No cabe duda de que tras cinco años de promesas y fracasos, uno puede dejar que su ánimo se desinfle, como le pasó al asturiano, y probablemente sí que es cierto que el ambiente se enrareció por activa y por pasiva.
Negar eso también sería mentir.
Luca di Montezemolo no tuvo más que recordar el contexto y las razones que pusieron a Fernando Alonso en las manos de McLaren Honda, evidentes, pero que hay que decir bien alto:
Alonso habría sido más ferrarista si Ferrari, en 2010, hubiese ganado un campeonato que era más fácil de ganar que de perder. Y si en la última carrera de la temporada pierdes el título dos veces [en dos años diferentes, se entiende], estas cosas se deben entender.
Por supuesto, cuando Alonso perdió los campeonatos él era el presidente, pero una cosa no quita a la otra. Sí, el mismo di Montezemolo decía en otra ocasión que a Alonso se le veía sombrío y lúgubre en su última etapa. Por suerte, sus declaraciones esta vez no hacen más que reforzar nuestra impresión de que, al menos, es una persona íntegra y coherente. Y las declaraciones consiguen que las palabras de Marchionne suenen, todavía más, a discurso de despechado.
Vía | Motorsport
