Hay quien no entiende mi punto de vista, pero yo tanto en el automovilismo como en el deporte en general disfruto igual con los ganadores que con los perdedores. No es ya una cuestión de apoyar al débil o de disfrutar con su sufrimiento, sino de que creo firmemente que para que haya épica y se escriba la historia tienen que ocurrir grandes derrotas. Y afortunadamente para quienes pensamos así, 2015 ha estado plagado de grandes fracasos.
Sería fácil dedicarle un enésimo artículo a McLaren-Honda y aunque me planteé organizar algún tipo de encuesta, deseché la idea ante su más que probable triunfo aplastante por la visibilidad de su torta. Pero siendo algo más amplio de miras el año de los fabricantes japoneses es como para que se lo hagan mirar. Honda no sólo ha hecho el ridículo en Fórmula 1. En el Mundial de Turismos llevan tres años viendo cómo otros son inalcanzables (primero los Chevrolet de RML y ahora los Citroën oficiales) y en Estados Unidos su brazo armado, HPD, presenta un estado ruinoso. Ya no es que Chevrolet domine la IndyCar (10 triunfos de 16, 7 de los diez primeros pilotos), es que su último LMP2 no lo quieren ni regalado y ni siquiera pudo participar en Pikes Peak como habían anunciado.
Pero como digo, Honda no está sola. Ahí tenemos el espantoso ridículo de Nissan con su LMP1. Pocos desean que al GT-R LM NISMO le vaya mal en Le Mans, pero han hecho méritos de sobra para aparecer en este artículo y ni la relativamente exitosa campaña en GT3 (aunque el GT-R no se prodiga entre los privados y eso al final cuesta dinero), ni el cuasimonopolio en LMP2, ni lo conocido de la GT Academy han salvado de la quema a Darren Cox. Mención aparte merece Toyota con un TS040 LMP1 que ha pasado de referencia a comparsa en el Mundial de Resistencia y encima parece hacer méritos para ingresar en la lista de fracasos de 2017 cuando se estrene su (segundo) Yaris WRC. Ah, y que nadie les hable del Lexus RC F GT3, en desarrollo desde hace dos años. Siempre les queda Estados Unidos, donde Kyle Busch les dio su primera corona en NASCAR.
No ha sido tampoco un año fácil en Francia. Con el Dakar 2016 a la vuelta de la esquina es fácil olvidarlo, pero el regreso de Peugeot a los raids no pudo ser más deslucido, y eso que para el Dakar la fiabilidad del 2008 DKR más o menos fue buena. Otra cosa es su propensión a los vuelcos, que Sébastien Loeb conoció de primera mano en Marruecos. Sumémosle a ello la escasa fiabilidad de los R5 de la casa (DS3 y 208), con Kajetan Kajetanowicz levantándole el Europeo de Rallyes al oficial de Peugeot Craig Breen, el culebrón Sébastien Loeb y un inicio más que discreto de DS en Fórmula E. Suerte que está ahí Pechito para levantar la moral de PSA.
Y aunque no haya levantado tanto revuelo como muchos de los fracasos anteriormente mencionados, el 2015 de Hyundai Motorsport es como para hacérselo mirar. Recordemos que el i20 WRC que estrenarán en 2016 debía haber debutado un año antes. Y como esto no era suficiente, encima se han tirado media temporada en guerra abierta con su primer piloto mientras el tercero le comía la tostada a los dos que tenía delante de él. Esperanzador tratándose de los mayores rivales de Volkswagen en el Mundial de Rallyes.
Para cerrar el capítulo de proyectos más o menos oficiales me gustaría una mención a Audi. No creo que su temporada haya sido mala, siendo honrosos rivales de Porsche en Le Mans y el Mundial de Resistencia, los mejores en el DTM y más que decentes en GT3. Pero irse de vacío en cuanto a títulos es un bagaje demasiado pobre para una marca tan exitosa como las de lo cuatro anillos. Aún con BOP y lastres, siempre se espera más de un marca tan grande.
Los áccesit a programas privados me gustaría dedicarlos a dos vistos y no vistos. El primero, el motor Motomatica de Trulli en Fórmula E, cuya historia se limita a un par de vueltas en pretemporada pasando por boxes y una multitud de cortocircuitos y baterías a la basura. El segundo, al Ford Focus TCR de Onyx, uno de los primeros vehículos anunciados para el campeonato de Marcello Lotti y que ha pasado más tiempo «en desarrollo» que compitiendo. Pero bueno, si crees que me he dejado alguno abierto estoy a propuestas en los comentarios.
Foto | Nismo y Red Bull Content Pool