El ex piloto austriaco manifestó que la actual Fórmula 1 ha perdido buena parte de la emoción que identificaba a la competición hace varios años atrás, porque, según su opinión, los muchos cambios que se han realizado devaluaron el gran espectáculo que alguna vez llegó a ser. Tanta electrónica, controles, reglas, sanciones y hasta las escapatorias que perdonan errores de pilotaje; han originado carreras «descafeinadas» en las cuales se pueden predecir los resultados con apenas observar las primeras vueltas.
Para Berger, los tiempos que corren para la Fórmula 1 son difíciles porque Mercedes exhibe un nivel dominante y los reglamentos técnicos no permiten mayores alternativas para equilibrar fuerzas. Comparó la época cuando fue piloto y destacó que antes los monoplazas tenía motores de hasta 1400 caballos de potencia y los errores se pagaban chocando contra las barreras o incrustándose en la grava; pero ahora los monoplazas tienen menos potencia que algunos coches superdeportivos y las escapatorias pavimentadas permiten que un piloto se reincorpore tras cometer un error, incluso sin perder su posición.
Mercedes está dominando la Fórmula 1, han hecho sus deberes, merecen respeto y deben ser recompensados. Pero la Fórmula 1 ha perdido mucha emoción. Si todo es normal y Hamilton o Rosberg están adelante después de la primera curva ya se tiene una idea de lo que sucederá. En mis tiempos no se sabía quién ganaría la carrera. Nos quedábamos sin combustible, se rompía la caja de cambios, los motores explotaban. Todo podía suceder, era como pilotar una bala de cañón.
Vía | grandprix247