Llega un momento en el que apetece tomarse a broma las noticias que salen sobre Toyota y su proyecto para el Mundial de Rallyes 2017. En público quiero decir, porque en privado ya hemos hecho más de una gracieta Iván Fernández y yo. Después de que Tommi Mäkinen apareciese por el sur de Francia este fin de semana para tranquilizar a la prensa y reiterar que alineará tres Yaris WRC en el Monte-Carlo del año que viene era inevitable que se volviera a especular sobre sus pilotos.
El caso es que el primer test del nuevo Toyota Yaris WRC está previsto para dentro de dos meses y Toyota ahora mismo sólo tiene bajo contrato a Teemu Suninen y algunos jóvenes pilotos nipones tutelados por Mikko Hirvonen, quedando en el limbo Sebastian Lindholm y Stéphane Sarrazin, que cargaron con el peso del desarrollo del fallido Yaris WRC de TMG. Ahora bien, sonar, han sonado todos los pilotos posibles: Loeb (reconoció hace poco que le sondearon), Ogier, Latvala, Mikkelsen, Neuville, Sordo, Lappi…
Los últimos nombres lanzados al aire se pueden leer en el número de esta semana de AUTOhebdo, pues la revista francesa apunta a Juho Hänninen y Bryan Bouffier (es decir, repetir los pasos de Hyundai) y Tommi Mäkinen parece resignado a tener que esperar hasta 2018 para fichar a un piloto de primera línea: sólo Thierry Neuville finaliza contrato este año y el finlandés no cree justo pagar por robar un piloto a otro equipo. Quedaría ahí la incógnita de Lappi, bien acomodado en VAG y a quien le faltaría experiencia con World Rally Cars.
Ahora bien, si algo queda claro es que Toyota nos va a brindar un mercado de fichajes divertidísimo, tanto en lo que respecta a los pilotos como en cuanto al personal y los flecos que quedan pendientes de resolver en materia de desarrollo del coche nuevo.
Vía | AUTOhebdo (edición impresa)
Foto | TMG
