El piloto francés se mostró complacido tras su primera experiencia, con el programa del coche 2016, en el simulador de Haas F1. Explicó que aprovechó las horas para ajustar la respuesta del acelerador y la recuperación de la energía durante el frenado, luego de enfocarse en tales detalles, el comportamiento resultó óptimo. Aunque habrá que esperar hasta la próxima semana para observar en vivo el chasis Dallara, Grosjean cree que en las pruebas virtuales, el monoplaza demostró tener una base correcta para aplicar un buen plan de desarrollo.
El debut de la escudería norteamericana será una de las atracciones de esta temporada, el proyecto liderado por Gene Haas tiene elementos interesantes y el contar con un piloto como Romain Grosjean otorga un valor agregado a sus expectativas. El francés, en una entrevista para el periódico L’Equipe, manifestó que en su período con Lotus aprendió que la información procedente del simulador y del túnel de viento muchas veces no corresponde con las sensaciones en el coche real, pero de cualquier forma sirven para tener una noción referencial del comportamiento del monoplaza en pista.
El simulador es una guía, una aproximación al rendimiento del coche según toda la información que disponemos, pero igual creo que la base del monoplaza parece ser muy buena. Trabajé en la configuración principal, ajustes de frenos, acelerador y diferencial. También en la altura de manejo, la aerodinámica y las comparaciones con respecto al túnel de viento.
Vía | racer