Desde que asumió la presidencia de Ferrari, Sergio Marchionne solo piensa en ganar el título de Fórmula 1 y para ello ha puesto a todo Maranello bajo presión. Según sus declaraciones, el grupo está de acuerdo con el estado de tensión que impera en la Scudería ya que alcanzar el cetro requiere del esfuerzo colectivo. Además de Marchionne, Maurizio Arrivabene, Sebastian Vettel, Kimi Räikkönen y James Allison, los rostros de Ferrari, se han comprometido con la misión de traer el número uno de regreso.
Añadió Marchionne que la pretemporada resultó positiva para la escudería italiana y más cuando el favoritismo recae sobre Mercedes. En Ferrari la misión es clara y todo el personal acordó enfocarse en la petición del título. Hay confianza en todas las áreas y es importante rescatar el espíritu y la motivación que existía cuando Michael Schumacher formó parte del equipo.
El título es un reclamo de todos y desde que asumí el cargo mis decisiones han sido orientadas para alcanzarlo. El objetivo es que el número 1 regrese a Ferrari, al coche rojo.
Por su parte, Sebastian Vettel se mostró de acuerdo con la presión ejercida desde todos los departamentos porque obliga a ser infalibles. Explicó que el año pasado, el cambio en la mentalidad de todo el equipo fue muy positivo, de allí que los resultados fueron los esperados de acuerdo a las posibilidades que tenían de batir a Mercedes. Pero ahora todo ha ido a mejor y se nota en el ambiente.
Está claro que Mercedes es el equipo a vencer, pero Ferrari estará desde el inicio peleando contra ellos. El año pasado fue motivador, las emociones y las alegrías de los ingenieros se hicieron sentir en el box. Creemos en nosotros mismos y hemos construido un gran coche.
Vía | motorsport total
