Disputará las dos próximas pruebas de la Copa del Mundo FIA de Rallyes Cross-Country con una Toyota Hilux V8 de Overdrive, sin embargo, el doble ganador del Dakar parece tener muy claro que no seguirá mucho tiempo con la pick-up japonesa. Tras mostrar su interés ya el pasado enero en el buggy de Peugeot (se llegó incluso a sentar en el 2008 DKR15+ de Romain Dumas para ver qué tal le sentaba), el qatarí ha reconocido que negocia con la firma del león disponer cuanto antes de una de sus unidades.
Y no, no está hablando de arrendar uno de los Peugeot 2008 DKR16 que recientemente ha adquirido PH Sport y que se pondrán a disposición de pilotos-cliente el próximo mes de septiembre. Nasser Al-Attiyah quiere disponer de una de las oficiales para su tercera prueba del año dentro del Rally-Raid (disputará Sealine y Abu Dhabi con la Hilux) en un programa, que al igual que el del WRC2, promete verse alterado por su preparación y participación en los próximos Juegos Olímpicos.
Hasta el momento a Al-Attiyah se le han resistido pocos ‘caprichos’. Tras ser piloto Volkswagen, el príncipe qatarí ha corrido con los modelos más competitivos del panorama de los raids: MINI All4, Hummer, Toyota Hilux V8 e incluso se ha fabricado su propio buggy. Ahora está seguro de que Peugeot le propondrá un trato igualitario con el resto de sus posibles compañeros (Loeb, Peterhansel, Sainz y Despres), antes ni tan siquiera de haberse hecho oficial su fichaje.
Al menos en esta ocasión, los patrocinadores no serán un problema, ya que al igual que los actuales pilotos Peugeot cuenta con el apoyo de Red Bull. El objetivo de las negociaciones será estar en el Dakar 2017 con un Peugeot 3008 DKR si se confirma el relevo.
Vía | Autosport.me
