Las cosas hay que reconocerlas, y si ayer sospechábamos, o nos preguntábamos al menos si Pirelli tendría que ver con los fallos aparentemente muy similares en Williams y Renault, hoy sabemos ya a ciencia cierta que ambas situaciones fueron debidas a problemas con los coches. En el caso de Kevin Magnussen, la suspensión trasera izquierda de su monoplaza se rompió, llevando al neumático al máximo estrés, hasta que perdió toda la presión.
Tuve un fallo de la suspensión que provocó el percance con el neumático. Fue bastante fácil de controlar porque estaba en la recta y no en una curva, así que solo tuve que levantar el pie. No parece que este vaya a ser el fin de semana sencillo que esperaba, pero ahí estaremos a pesar de todo.
Nick Chester, director técnico del equipo Renault, confirmó el fallo en la suspensión y también la sustitución de los elementos que fallaron para que esto no sucediese de nuevo. Lo cierto es que con los dos Renault eliminados en la Q1, el fin de semana parece de todo menos agradable para los amarillos.
En el caso de Williams, los problemas de Massa fueron por culpa de la puesta a punto del coche y los nuevos vanos en los conductos de freno. Misterio resuelto.
Vía | Pitpass