El asturiano no se ve dentro del Gran Circo cuando deje de ser piloto de Fórmula 1, una decisión distinta a la de otros grandes campeones (incluso Valentino Rossi poco a poco ya está preparando su futuro siendo jefe de sus propios equipos) pero es completamente entendible y respetable. Fernando Alonso lleva más de una década compitiendo por las victorias en la categoría reina del automovilismo y por ello no se imagina un futuro a medio plazo sin competir.
En una entrevista concedida a distintos medios internacionales (entre ellos el Diario AS) dejaba claro que ya tiene en mente algunos retos cuando deje la Fórmula 1, e incluso le ha puesto nombre y apellidos a los mismos. Y es que al bicampeón del Mundo quiere seguir los pasos de Graham Hill convirtiéndose en el segundo piloto capaz de ganar la triple corona del automovilismo. O lo que es lo mismo, sumar a su victoria en el Gran Premio de Mónaco, la de las 24 Horas de Le Mans y la de las 500 Millas de Indianápolis, algo que el padre de Damon Hill consiguió, sumándolo a sus dos títulos de Campeón del Mundo de F1.
Sí, hay tres competiciones que están en lo más alto de la leyenda de los deportes de motor, el GP de Fórmula 1 de Mónaco, las 24 Horas de Le Mans y las 500 Millas de Indianápolis y yo sé que es complicado ganar las tres, ya lo hice en Mónaco, sería un gran reto y si estoy feliz y motivado voy a intentar conseguir ese reto.
El primer objetivo, el de competir en la mítica prueba de Le Sarthe no parece tan descabellado. Hasta su fichaje por McLaren-Honda, Alonso tuvo sobre la mesa la posibilidad de competir en Le Mans 2015, equipo que finalmente se llevaría la victoria con otro piloto de la actual parrilla de la Fórmula 1 al volante de su 919 Hybrid, Nico Hülkenberg. El alemán tiene una de las tres muescas en su revólver, al igual que Alonso, sin embargo, es Juan Pablo Montoya el que más cerca está de poder repetir la hazaña de Hill, teniendo ya el triunfo en Mónaco y el de Indianápolis en su palmarés. De momento, motivación a Fernando no parece faltarle:
En 2015 estaba empujando el coche en Hungría para llegar a la calle de boxes por lo que no se puede decir nada de mí; que soy lento, que soy viejo, que soy feo, lo que sea, pero no que no estoy motivado.