Se han lavado las manos. Los comisarios del Gran Premio de España han preferido determinar que el accidente protagonizado por Nico Rosberg y Lewis Hamilton ha sido un incidente de carrera, como confirmaron los propios pilotos de Mercedes una vez comparecieron ante los micrófonos de los periodistas presentes este domingo en el Circuit de Barcelona-Catalunya.
Entre las explicaciones que han ido aflorando desde el final de la carrera está cómo Rosberg realizó ajustes en su volante a la salida de la curva 3, donde su motor se puso a ahorrar carburante, algo que probablemente propició que Hamilton se acercara y terminara tratando de cerrar la puerta de forma quizá excesivamente tardía. En todo caso la atribución de culpas difiere mucho según a qué miembro del equipo Mercedes preguntes.
Los comisarios tampoco tuvieron mucho trabajo esta tarde en Montmeló pues también decidieron imponer una simple reprimenda a Carlos Sainz. El español de la Scuderia Toro Rosso debió dar explicaciones al encontrarse un semáforo en rojo a la salida del carril de boxes cuando se disponía a pilotar hacia la parrilla. Conserva así su sexto puesto final.
Foto | Mercedes AMG F1