A pesar de que fueron grandes rivales en el pasado, no es la primera vez que vemos elogios entre Sébastien Ogier y Sébastien Loeb, incluso habitualmente se les ha visto charlando de forma distendida en las asistencias (recientemente en las de Hockenheim). En esta ocasión, ha sido el nueve veces Campeón del Mundo de Rallyes el que ha roto una lanza en favor del piloto de Volkswagen, respaldándole en su cruzada contra el actual sistema de orden de salida.
Ogier ha exigido durante los últimos años la modificación de un reglamento que obviamente fue creado para frenar el dominio de un piloto. Obligándole a salir primero durante las dos primeras etapas, el líder del campeonato se ve claramente penalizado en las pruebas de tierra ya que debe limpiar la primera capa de arena suelta, dejando la superficie con mayor grip para los pilotos que le siguen. Loeb defiende que cualquier regla que penalice al conductor más rápido y que le pudiera impedir ganar era una norma sesgada y mala para el WRC.
Tiene razón. Algunas personas parecen pensar que no debería hablar sobre esto, pero tiene razón en lo que dice. Es lo que defendí siempre cuando yo competía. Lo que queremos es algo justo. Debe ganar el mejor piloto con el mejor equipo. Es como si un velocista de 100 metros lisos: si él es el campeón no empieza la carrera desde el césped o la grava, está en la misma línea que el resto y si sigue siendo el mejor entonces él todavía ganará. Entiendo la frustración de Ogier, dos días limpiando es demasiado. Un día era una lucha, pero estaba bien. Dos días destruyen sus opciones. Estoy seguro que es mejor que el resto, y si es mejor, entonces es natural que él gane.
La FIA no ha hecho oídos sordos a las quejas del tricampeón del Mundo. Jarmo Mahonen, responsable del área de rallyes en la Federación Internacional ha reconocido que se están estudiando todas las opciones de cara a la próxima temporada, pero que eso implica desde devolver el tramo de clasificación (medida que ya se utilizó en 2012-13 y que satisface al piloto de Volkswagen) o incluso hacer que el líder tenga que abrir los tres días la pista, solución que obviamente terminaría de desquiciar a Ogier.
Obviamente lo que no parecen licitas son declaraciones como las realizadas por Jost Capito tras el Rally de Portugal. En aquel momento quiso restar méritos a la victoria conseguida por Kris Meeke en unas palabras que parecían más propias de un arrebato en caliente que una opinión realmente fundada. Llegó a decir que la participación de ‘wildcards’ (pilotos que no siguen el campeonato completo y hacen apariciones esporádicas) devalúan el Campeonato, precisamente una figura más que habitual en la historia del WRC, con pilotos especialistas en una superficie o locales que eran capaces de plantar cara a los oficiales en un evento determinado, algo que dotaba de gran variedad al Mundial y que se ha ido perdiendo con los años. También son ganas de reescribir el cuento…
Vía | Autosport
