Hoy había bola de partido en cuanto a la decisión de los dirigentes de la Fórmula 1 de introducir o no finalmente el Halo la próxima temporada. Los jefes de los seis mejores equipos y el resto de partes implicadas (el grupo de estrategia) han concordado hoy en Ginebra que se retrasará finalmente la introducción del sistema de protección para la cabeza hasta al menos la temporada 2018.
Una decisión que viene tomada a pesar de los deseos de Jean Todt, presidente de la FIA, de introducir el Halo ya en 2017, tras descartar al menos de momento el AeroScreen diseñado por Red Bull. Ferrari y la propia escudería de las bebidas energéticas probaron el dispositivo en sus respectivos monoplazas durante la semana del Gran Premio de Gran Bretaña, sin embargo, tanto las escuderías como el propio Bernie Ecclestone (seis votos cada parte) parecen estar de acuerdo en que el sistema necesita más tiempo para ser mejorado.
Con estos meses de prórroga se espera que el Halo sea pulido con el objetivo de eliminar las dudas en materia de visibilidad, tiempo de extracción de los pilotos y protección de la cabeza que había generado el mismo durante las últimos meses. No ha superado el primer filtro, por lo que no se espera ni tan siquiera que sea votado por la Comisión de la Fórmula 1, el que hubiera sido el siguiente paso antes de presentarse definitivamente ante el Consejo Mundial del Motor de la FIA. Tal vez una nueva oportunidad para optar por la alternativa que más convence a todos, el AeroScreen…
