¿Cuantas veces hemos visto a pilotos de motos que están en cabeza del pelotón y una vuelta antes de hora levantan el brazo y celebran una victoria que aún no llegaba? Es bastante menos común en las carreras de coches, donde además de pizarras también cuentan con una radio que les mantiene informados de todo. Aún así, Sebastian Vettel dio por terminado el Gran Premio de Alemania una vuelta antes de lo previsto, aunque el equipo le avisó a tiempo.
Tras cruzar la línea de meta por penúltima vez el pasado domingo, el vídeo que ha sido publicado tras el fin de semana muestra como el piloto alemán reduce la velocidad de forma clara e incluso se va largo en la primera curva para recoger goma -algo que se hace para sumar el máximo peso posible para que el coche no corra el riesgo de quedar por debajo del reglamento-.
Tras volver a pista parece que el ingeniero de pista del tetracampeón avisa a su piloto y este rápidamente vuelve a pisar el acelerador y recuperar el ritmo. La confusión le costó bastantes segundos pero no la quinta posición que ocupaba tanto antes como después de esa penúltima vuelta. Cosas como esta nos recuerdan que a pesar de lo espectaculares de algunas de sus jugadas, los pilotos de Fórmula 1 siguen siendo humanos. ¡Hay que prestar atención!