Ha costado, pero finalmente las partes se han sincerado y al menos los equipos han reconocido que tal vez la decisión de meter con ‘calzador’ la cita asiática ya esta temporada fue un tanto precipitada, especialmente si tenemos en cuenta que la organización del Rallye de China no ha sido muy eficiente, al menos en vista del resultado final. Muchos como Yves Matton incluso han reculado y ha asegurado que sus peticiones durante 2015 incluso fueron malinterpretadas.
Lo cierto es que el belga parecía bastante rotundo cuando aseguraba que la presencia del Rallye de China en el calendario y la existencia de 14 pruebas podrían condicionar el futuro de Citroën en el Mundial de Rallyes. Ahora que el futuro de la firma de los dos chevrones está asegurado, Matton parece haber cambiado la dureza de sus palabras, diciendo incluso que igual se apresuraron a la hora de incluir una cita en el gigante asiático.
Mis observaciones del año pasado eran a menudo malinterpretadas. Siempre hemos dicho que tener una prueba en China era muy importante para nuestra estrategia de retorno al WRC, pero lo que siempre dije es que era vital tener un rally que se sostuviera en el tiempo, no se les pidió que se apresuraran. Para tener un impacto las cosas tienen que estar bien construidas, por lo que no puede ser cosa de un año. Estamos ante un caso que debió ser evitado, teniendo en cuenta la información que nos ha llegado a nosotros incluso mucho antes, parece que los cimientos básicos de la prueba no eran realmente sólidos. Después de eso, nuestra posición no ha cambiado. Sin embargo, dadas las dificultades a las que se enfrentaba el evento antes de su cancelación, creo que antes de introducir en el calendario a la prueba, como fue el caso de este año, la FIA y el promotor tendrán que tomar un número significativo de precauciones, o al menos recibir algunas garantías serias. Nuestro deseo es mantenernos en un presupuesto equivalente a un calendario de 13 pruebas.
El director del equipo Hyundai va en la misma dirección que su homólogo de Citroën. Alain Penasse encuentra este hecho bastante desafortunado y comprende lo difícil que puede ser para una organización nueva (él es parte de la organización del Ypres Rally) crear una prueba en una región en la que no hay prácticamente cultura del automovilismo, pero también cree que la FIA y el promotor deberían haber puesto sus medidas para que esto no hubiera ocurrido:
Fui en junio para ver los tramos y era bastante agradable. Tenía todo para ser un buen rally distinto. Sé lo complicado que es para una organización partir desde cero con una carrera, más aún en una región en la que no hay cultura de las carreras. Tal vez hubiera sido necesario evaluar el rally realmente en otro campeonato antes de integrarlo en el WRC. Esto se hizo en el pasado. Al mismo tiempo, las tormentas son impredecibles, sin embargo… hemos visto que la preparación ha ido siempre un poco tarde.
Estas voces de los dirigentes de los equipos (Citroën y Volkswagen eran los más interesados en ir a China) se suman a la de algunos expertos locales que aseguraron que organizar una prueba sólo por su proximidad a Pekín no era lo más adecuado y que en el Campeonato Nacional había otras opciones más viables. Michèle Mouton se ha defendido de estas opiniones sobre la precipitada decisión de llevar el WRC de vuelta al calendario echando balones fuera. En declaraciones también a AUTOHebdo, la francesa ha asegurado que Jarmo Mahonen se había encargado de supervisar la prueba y de explorar otras opciones y que esa había sido elegida como la mejor alternativa.
Fui allí en junio con distintos equipos y aun así todavía había mucho trabajo por hacer, incluyendo el asfaltado en algunas especiales. Cuando regresé hace poco, se fue a ver lo que era posible hacer como consecuencia de las inundaciones. Los puentes se habían colapsado, los caminos fueron cortados, había un montón de piedras… entonces buscamos una alternativa, pero no había suficientes carreteras. No creo sin embargo que la integración de la prueba haya sido precipitada. Mahonen, director de rallyes de la FIA, había visitado el lugar el año pasado para evaluar la prueba. También se estudiaron otras opciones, como por ejemplo una prueba ubicada cerca de la frontera con Mongolia, la cual hubiera supuesto tres días de viaje para los camiones desde Beijing y aunque sólo sea por razones de coste, no era lo óptimo.
Vía | AUTOhebdo (edición impresa)