Tras su primer fin de semana de gran premio trabajando con Sauber en Singapur, para Xevi Pujolar el Gran Premio de Malasia es la segunda carrera de su regreso a la categoría reina con el equipo suizo y la primera sin el caos relativo que puede suponer un «debut» como el suyo. Con el objetivo de escuchar sus impresiones, Diariomotor Competición se sentó a charlar con el catalán, que nos habló del objetivo que tiene con Sauber, de la diferencia entre los motores Ferrari de 2015 y 2016 y hasta de qué categoría estuvo a punto de recibirlo.
Tal y como se espera de alguien tan profesional como Xevi Pujolar, llega a la hora acordada… prácticamente al minuto. Se le nota relajado, satisfecho de estar donde está y con muchas ganas de ayudar a que Sauber obtenga los resultados que merecen por su historia. Tras un par de bromas para romper el hielo, nos metemos en situación. Transmite una cierta serenidad, la de alguien que conoce el desafío que tiene por delante pero también el potencial del que dispone Sauber para lograrlo.
Diariomotor Competición: «Ante todo, muchas gracias por dedicarnos tu tiempo. Empezamos con lo más reciente, tu llegada a Sauber tras haber estado en Toro Rosso a principios de año. Un paso interesante pero sobre todo un cambio con respecto a tu experiencia anterior. ¿Qué primeras impresiones tienes?»
Xevi Pujolar: «Bueno, aunque cada equipo tiene sus cosas, todos trabajan de forma bastante parecida. El motivo por el que quise ir a Sauber fue el potencial que tiene el equipo, así como las posibilidades a nivel personal-profesional que el equipo me presentaba. En mi opinión, dentro de la zona media de parrilla, Sauber es uno de los equipos con mejores instalaciones y eso permite que, si consigue recuperarse tras dos años muy difíciles -y parece que va a ser así-, se puede reestructurar todo el equipo y puede estar en cabeza de ese grupo medio. Y quien sabe si se puede obtener algún resultado sorpresa… esa sería la idea. A nivel personal, llegar al equipo en este momento en el que debe recuperarse y poder aportar mi experiencia es algo muy atractivo.»
DMC: «Entonces, ¿qué objetivos te marcarías para el equipo a corto y medio plazo?»
X.P.: «Este año… el objetivo es marcar puntos. El año que viene, lo suyo sería luchar con Force India, Toro Rosso… toda esta gente de mitad de parrilla. Devolver a Sauber a su posición antes de que empezara esta situación tan crítica. Volver a esa posición, pero con todos los cambios que habrá de reglamento, hay que conseguir que Sauber pueda trabajar al nivel tan profesional que tienen todas esas estructuras de la zona media.»
DMC: «¿Le falta algo a Sauber a nivel organizativo o técnico? ¿O es solo una cuestión de dinero?»
X.P.: «Evidentemente, este difícil periodo trajo consigo que algunos colaboradores se fueran y por lo tanto hay que reconstruirlo todo de nuevo y eso trae su tiempo. Mi llegada es parte de ese proceso, así como la de otros. El objetivo de estos fichajes es devolver al equipo a su posición de antes de esta caída.»
DMC: «Mencionábamos brevemente la próxima temporada y los cambios de normativa. Neumáticos más anchos, cambios a nivel aerodinámico y de chasis… la realidad es que los coches del año que viene serán completamente distintos. ¿Cómo se prepara esta situación?»
X.P.: «A nivel de ingeniería es un reto muy interesante pero evidentemente necesitamos una estructura capaz de afrontar esto. Poco a poco vamos recuperando lo necesario para hacerlo. Para un equipo de zona media es mucho más difícil que para los grandes equipos que pueden tener mucha más gente. Pero a nivel profesional es un aliciente muy bueno, el tener un cambio de normativa de este tipo, puesto que te permite aportar nuevas ideas y encontrar cosas que quizás otros no han sabido ver y que te puedan dar una cierta ventaja en pista.»
DMC: «De hecho, Sauber ya tiene precedentes de esto y en 2012 encontraron varias soluciones que los equipos de cabeza como Ferrari o McLaren acabaron copiando. De hecho, Sauber tiene fama de contar con muy buenas instalaciones y un trabajo sólido. ¿Lo has visto así?»
X.P.: «Sí, en Hinwill hay una estructura muy buena y una forma de trabajo mucho más eficiente que otros equipos».
DMC: «¿Puede que el no tener un fabricante detrás sea una ayuda en ese sentido? Menos aros por los que pasar y algo más de libertad.»
X.P.: «Sí, hay algo más de flexibilidad.»
DMC: «Volviendo a la próxima temporada, ¿cómo esperas que cambie la Fórmula 1?»
X.P.: «Yo espero que sea más competitiva.»
DMC: «¿En el sentido de deseo o de expectativa?»
X.P.: «De deseo, aunque… bueno, veremos. De momento es un interrogante, el cómo será todo. Entre neumáticos, aerodinámica y con todos los cambios, creo que será interesante de ver.»
DMC: «¿Qué crees que será más desafiante para los equipos? ¿Neumáticos o chasis?»
X.P.: «Todo. Las dos cosas seran bastante desafiantes.»
DMC: «Cambiando de tema por completo, ¿cómo fue la salida de Toro Rosso? ¿Hay algún detonante en particular o…?»
X.P.: «Fue una situación política interna con todo el tema ‘equipo Verstappen’ en Toro Rosso. Acabó mal. No hay más. De hecho, es difícil entenderlo pero así es como fue, no hubo nada más.»
DMC: «Y a nivel profesional, ¿no te habría parecido atractivo seguir con Max Verstappen en Red Bull y poder ayudar a desarrollar un piloto que tiene mucho talento pero que a veces requiere esa capacidad de guiarle que demostraste a lo largo de 2015 y las primeras carreras de 2016?»
X.P.: «Sí pero claro, Red Bull y Toro Rosso… son equipos distintos. La situación acabó de esta forma y en ese momento yo tuve que buscar algo que fuera bueno para mi futuro profesional. Incluso llegué a considerar salir de la Fórmula 1 si no encontraba una oportunidad buena de verdad de seguir. Hacer algo distinto. He sido ingeniero de pista muchos años y quería hacer algo que supusiera una evolución en mi carrera profesional. Una opción era ir a Estados Unidos y hacer algo más interesante. La otra, una oportunidad como la de Sauber, que es perfecta. Era justo el siguiente paso que yo quería dar. Puede que hubiera habido la posibilidad de seguir con Max Verstappen y ser campeón del mundo con él, eso me lo había planteado. Pero dejar de trabajar con él y seguir de ingeniero de pista no me atraía tanto. La oportunidad de poder trabajar en un equipo como Sauber con una infraestructura tan buena y una posición como la suya en la que hay que reorganizarse y evolucionar era perfecta.»
DMC: «Y ¿hubo algún contacto en otra categoría o fue simplemente algo que te planteaste?
X.P.: «Sí, sí. Estuve hablando con gente de otras categorías.»
DMC: «¿Puedes dar algún detalle?»
X.P.: «(Sonríe) La categoría que tenía mejores opciones para mi era la NASCAR. Estuve en una carrera en Estados Unidos, me invitó un equipo y todo. Me interesaba mucho pero cuando salió lo de Sauber me dije que no. Era muy interesante pero a nivel profesional sentía que mi trabajo en la Fórmula 1 no había terminado y quiero llegar arriba de todo.»
DMC: «Para terminar, una pregunta que es interesante plantear teniendo en cuenta tu situación. Tanto Toro Rosso como Sauber llevan motor Ferrari aunque evidentemente la especificación no es la misma. Hasta qué punto hay diferencia entre la versión del año pasado y la de este? Es evidente que hay una diferencia pero, ¿es tan grande?»
X.P.: «No.»
DMC: «¿Cómo valorarías esta diferencia?»
X.P.: «No es tan grande. No puedo dar detalles pero no es tan grande. Puede haber diferencias mayores con otros motores pero no en este caso».
DMC: «Pues eso es todo. Muchas gracias una vez más por tu tiempo y esperemos que el proyecto llegue allí donde quieres verlo.»
X.P.: «A ver, esperemos que sí. ¡Muchas gracias!