Los pilotos españoles cumplieron sus «promesas» en el Gran Premio de Malasia. Si Fernando Alonso decía que aún saliendo desde la última posición era posible llegar a los puntos y lo hizo, Carlos Sainz avisaba que con su coche era difícil poder luchar por acabar entre los diez primeros… y finalmente fue undécimo. Era un día que se presentaba difícil pero aún así ambos pilotos lucharon, si bien sus resultados fueron algo dispares con Alonso remontando y llegando al séptimo puesto y Sainz llegando en una frustrante undécima posición.
Para Fernando Alonso, la carrera se puso a su favor en la primera curva con el toque que dejó fuera de carrera a Sebastian Vettel y en posiciones retrasadas a Nico Rosberg. Pero antes incluso del incidente llegado apenas segundos tras apagarse la salida, su excelente partida le situó rápidamente a las puertas de los puntos a pesar de salir desde la última posición. Cuando salió el primer coche de seguridad virtual, Alonso fue uno de los pilotos que pararon y que intentaron arriesgarse con la estrategia. Y le salió bien.
Con un McLaren que cada día va mejor y el tiempo ganado al parar en el momento en el que lo hizo -la ventaja era que al parar mientras los demás coches ruedan a velocidad reducida, se pierde menos tiempo… pero era pronto para parar y comprometía la flexibilidad posterior-, Alonso supo aprovechar la circunstancia para empujar durante toda la carrera, tal y como él mismo explicaba tras la misma. Finalmente el resultado fue un séptimo puesto, por delante incluso de Jenson Button. Según Alonso, la carrera fue emocionante y le permitió empujar hasta el final.
Algo más difícil fue el día para Carlos Sainz, que afirmaba tras terminar la carrera que el Gran Premio de Malasia ha sido una de sus mejores actuaciones del año, teniendo en cuenta el material con el que contaban. El Toro Rosso jamás estuvo a la altura necesaria para llegar a los puntos y los abandonos y problemas de pilotos como Kevin Magnussen, los dos Haas, Sebastian Vettel o Lewis Hamilton ciertamente ayudaron al madrileño a estar más arriba.
Si la undécima posición ya es decepcionante por estar fuera de los puntos, lo que pudo haber sido teniendo en cuenta el rendimiento del Toro Rosso este fin de semana aún se vería con más pesimismo. Para Sainz, lo peor no es necesariamente el resultado sino el hecho de estar por detrás de Renault en un circuito donde esperaban batirles de forma relativamente holgada. Puede que el difícil final de temporada 2016 de Sainz no haya hecho nada más que esperar…