Los test en Catalunya se suceden estos días. Aprovechando la variedad de terrenos y lo acostumbrada que está esa zona del país a las pruebas de los equipos mundialistas (y al buen tiempo en esta época del año), tres de los cinco fabricantes del Mundial se han dado cita para probar tanto los vehículos de la próxima temporada como preparar los coches para afrontar esta recta final del calendario 2016 (es el caso de Hyundai). Sin embargo, los test no han estado exentos de problemas.
Toyota se ha desplazado con su Yaris WRC 2017 de test y un Juho Hänninen que incluso está pensando en empadronarse aquí debido a las largas temporadas que pasa en nuestro territorio. Todavía sin haber visto la famosa tercera unidad que iba a ser destinada a probar sobre asfalto (Monte-Carlo está a la vuelta de la esquina y Córcega se disputa en primavera), estamos siendo testigos de un coche con cada vez menos modificaciones respecto a jornadas de pruebas anteriores. Sin embargo, la sesión de ayer tuvo que ser detenida antes de tiempo.
En una de las pasadas por el tramo, Hänninen se encontraba con una gran roca en una curva de izquierdas rápida en la que dañaba seriamente la suspensión delantera izquierda y debía detenerse a la espera de la llegada de las asistencias. Por su parte, M-Sport no ha empezado con buen pie los test sobre asfalto del nuevo Ford Fiesta RS WRC 2017 con Ott Tänak como piloto de pruebas.
Según los allí presentes, las pasadas han sido contadas con los dedos, espaciadas con largas estancias en la improvisada asistencia del equipo británico por problemas mecánicos.
Recordemos que el Fiesta ha sido el último en empezar con los test, no siendo hasta antes del Rally de Finlandia cuando se realizaron los primeros ‘outings’ con un híbrido con mecánica nueva y carrocería vieja. Ahora, ya sobre la nueva base, los de Malcolm Wilson deberán apresurarse si quieren estar a tiempo para el Rallye Monte-Carlo 2017. Eso sí, el sonido es espectacular.