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Malcolm Wilson muestra las nuevas medidas de seguridad para los WRC de 2017

Ya avisábamos hace unos meses que la FIA y los fabricantes perseguían aumentar la seguridad de los nuevos World Rally Cars con la llegada del nuevo reglamento técnico en 2017. Hoy ha sido el propio Malcolm Wilson el que ha dado un pequeño repaso a todas las medidas que se han tomado y que concretamente el Ford Fiesta RS WRC 2017 que estos días hemos visto rodar sobre el asfalto catalán, también deberá incorporar.

El área en la que más se ha trabajado ha sido el de la protección ante impacto laterales, especialmente en lugares clave como las puertas, reforzadas a su vez por nuevos elementos estructurales. Con puertas más anchas gracias a las nuevas medidas de los World Rally Cars, se ha ampliado la espuma que absorbe impactos situada en el interior de las mismas, así como una mayor cantidad entre los baquets y detrás de ellos.

Se ha puesto cifras a todo ello, asegurando que la nueva espuma utilizada hacer que se absorba hasta un 20% más de energía en los impactos. Además, se colocará un nuevo acolchado adicional en el reposacabezas u orejeras que llevan los asientos para limitar el movimiento de la cabeza ayudando a la ya importante labor del hans. Además, se sigue trabajando en mejorar los soportes de los asientos con el objetivo de que trabajen de forma más eficiente frente a los accidentes.

Sólo deseo que las normas actuales de seguridad hubieran estado cuando yo pilotaba, porque desafortunadamente para mí sufrí un accidente muy grave y desde entonces han evolucionado mucho. Por ejemplo, los primeros coches de rallyes no tenían jaula de seguridad para proteger a las tripulaciones ante cualquier vuelco. Luego se pasó al aluminio, pero por supuesto no hubo ninguna resistencia y era únicamente para cumplir con la reglas. Así que se ha dado un gran paso en el diseño de las jaulas, hasta el punto de que ahora es la estructura principal del coche, que recoge todos los puntos de suspensión y transfiere la carga a lo largo de la carrocería. Eso sólo es una parte. El asiento es como una cascara de seguridad, que por supuesto ahora está diseñada para que se mueva en el coche, por lo que los ocupantes no se lesionan, pero por otro lado protege al conductor.

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Iván Fernández

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