Tras tres temporadas en el Campeonato del Mundo de Resistencia una vez terminada su etapa en la Fórmula 1, Mark Webber ha anunciado su retirada para finales de 2016. El piloto australiano, campeón del mundo de resistencia en 2015, seguirá atado a Porsche como embajador de la marca, siguiendo los pasos de otros ex-pilotos como Tom Kristensen o Allan McNish con Audi. Su última carrera será las 6 horas de Bahréin el día 19 de noviembre.
Webber reconoce que se le hará extraño dejar de competir: «Echaré de menos la velocidad y la competición pero quiero irme estando arriba y tengo ganas de empezar con mis nuevas tareas. Fue un gran cambio de la Fórmula 1 al LMP1, una experiencia completamente nueva. Pero llegó en el momento adecuado y me gustó compartir coche con Timo (Bernard) y Brendon (Hartley) y nuestra química juntos es algo que siempre recordaré. Será raro meterse en el coche por última vez en Bahréin pero por ahora disfrutaré de cada momento de las carreras que quedan», explicó.
A Webber le quedarán tres carreras por delante para seguir disfrutando del mundo de la competición, quizás pensando en lo que pudo haber sido la temporada 2016 de no haber sufrido un dificilísimo inicio de campeonato. A pesar de haber sumado tres victorias seguidas junto a Brendon Hartley y Timo Bernhard, su mal comienzo de temporada les sitúa en cuarta posición de la general, apenas medio punto por delante de uno de los Audi y a más de 50 puntos de los líderes del certamen, sus compañeros en Porsche.
La retirada del australiano deja un volante en el equipo Porsche en el WEC que es especialmente apetecible, teniendo en cuenta el rendimiento de los 919 en los últimos años. La lógica y el sentido común dicen que Nick Tandy -uno de los ganadores en la edición de 2015- debería ser el elegido para ocupar el asiento pero como siempre en las carreras, habrá que esperar algunas semanas o incluso meses para empezar a vislumbrar la realidad de lo que será la alineación de Porsche en 2017.
